¿Alguna vez has ido al supermercado sin tu querida lista de la compra y no has podido recortar totalmente todo lo que contenía? Bien, puede que esto se deba precisamente a tu forma de ser, es decir, a tu personalidad. La memoria de la que disponemos cada uno tiene sus factores de mejora, pero también tiene algunas influencias que pueden empeorarla. Pero… ¿alguien había tenido en cuenta la personalidad como un factor en contra de la memoria? Ahora, gracias a un reciente estudio por parte de la Facultad de Medicina de Icahn en el Monte Sinaí (Nueva York), la respuesta es sí.
Tu personalidad puede afectar a tu memoria
Según comentan los investigadores, liderados por Sophia Frangou, la personalidad de tipo neurótica ya se había vinculado de forma universal en dificultar las acciones de la gente, como la memoria. Se conocía la relación, pero no el motivo o mecanismo por el cual dicha personalidad produce estos males. Sin embargo, gracias al análisis de la actividad cerebral del que disponemos hoy en día, un grupo internacional de científicos de Nueva York, Reino Unido y Suiza han sido capaces de vislumbrar una correlación entre ciertos tipos de personalidad y el aumento o disminución de la plasticidad cerebral.
Para el estudio, los científicos midieron la actividad cerebral de 40 individuos adultos mientras llevaban a cabo una prueba de memoria de trabajo. Se utilizó la técnica de neuroimagen de resonancia magnética funcional (fMRI), la cual utiliza el flujo sanguíneo cerebral para demostrar si existe o no actividad en determinadas zonas de nuestro órgano pensante.
Durante las pruebas de memoria, se pidió a los voluntarios que vieran una secuencia de letras en una pantalla de ordenador e indicaran asociaciones con las secuencias anteriores. A continuación, se evaluaron los rasgos de personalidad de los participantes mediante una prueba psicológica muy conocida llamada NEO-PI-R, la cual mide las cinco rasgos de personalidad principales: Neurocitismo, extraversión, apertura a nuevas experiencias, amabilidad y esmero. Dos de estos rasgos se correlacionaron intensamente con el nivel de eficiencia memorística, según la publicación del estudio en la revista Human Brain Mapping.
“Hemos detectado que las personas que son más neuróticas, con más tendencia a preocuparse, son menos eficientes memorísticamente. Mientras tanto, los sujetos que puntuaron más alto en la escala de conciencia, que se define como una mayor auto-disciplina, completaron la tarea de forma más rápida y con una precisión superior”
La relación entre memoria y personalidad está en el cerebro
De nuevo vemos que la correlación existe, pero, ¿dónde está?
Al usar un análisis por neuroimagen y poder vislumbrar la actividad cerebral en tiempo real, ahora sabemos algunas cosas nuevas: Las personas que realizaron mejor las tareas memorísticas tenían una mayor actividad en la zona superior del cerebro, y sus conexiones neuronales eran más fuertes; a su vez, los individuos neuróticos necesitaban más tiempo para realizar las mismas conexiones cerebrales.
Si somos neuróticos y tendemos en exceso a la preocupación, Frangou afirma que es probable que tardemos más en realizar compras por ejemplo, pues no recordaremos tan rápido nuestra lista, e incluso volveremos a casa sin cosas que realmente necesitábamos. La preocupación promueve la falta de concentración, que acaba pasando factura a nuestra memoria.
Como siempre advertimos, el estudio tiene sus pros y sus contras. Se han encontrado relaciones intensas entre el neurocitismo, la conciencia y la memoria de trabajo; esto es una gran base para futuras investigaciones. Sin embargo, el estudio tan solo se realizó en 40 personas, una muestra escasa, por lo que serán necesarias futuras investigaciones que confirmen los resultados.
Vía | Smithsonian.