La realidad sobre el dinero dista mucho de la que recorre nuestra imaginación alimentada por tantas películas de Hollywood o biografías sobre nuevos ricos que casi consiguieron sus bienes por “suerte”. Gracias a todas estas creencias combinadas se han acabado creando multitud de opiniones erroneas sobre el vil metal. Según Maggie Panadero, psicóloga de problemas de relación, dinero y riqueza, estas actitudes hacia el dinero se crean en la infancia y ni siquiera nos damos cuenta de que son erroneas. Podemos llegar a pensar de forma racional sobre el dinero y, sin embargo, tener un comportamiento irracional al poseerlo.
Así que vamos a analizar algunas de estas creencias erróneas, una por una.
1. El dinero te hará feliz
Si, como dice la conocida página de Facebook, yo también preferiría llorar en un Ferrari, pero según Kathleen Gurney, directora general de Financial Psychology Corp:
“No es el dinero el que te hace feliz. Si no sabes como deseas usarlo, como un vehículo para crear felicidad, lo usarás indiscriminadamente y nunca lograrás lo que valoras”
Según Gurney es necesario poseer unos objetivos personales, metas y aspiraciones, sin llegar a dejarse influenciar por el dinero. Es decir, no te hace feliz el dinero, sino la forma adecuada de gastarlo.
2. El dinero da poder
Mucha gente piensa, erróneamente, que el dinero sirve para obtener poder y subir la propia autoestima. Según Maggie Baker si damos esta prioridad al dinero y posteriormente lo perdemos (al ser despedidos, por ejemplo), no solo perderíamos dinero sino también autoestima, pues estaríamos mezclando patrimonio personal y autoestima.
Es decir, no podemos darle más valor al dinero del que tiene. Es un bien material y no sentimental.
3. Nunca hay suficiente dinero
Según Gurney, este es una creencia muy común y un intento de racionalización para no enfrentarse a la verdad en contraposición a lo que nos gustaría que fuera. Además, según comenta la psicóloga, las personas tienden a endeudarse tratando de llegar a este supuesto punto de “suficiente”. Realmente no existe ese límite de suficiente, porque siempre querremos más.
Para evitar esto el consejo es centrarse en las cosas verdaderamente importantes,como la supervivencia y la seguridad. A continuación hay que pensar donde ir añadiendo el dinero “extra”, lo que solemos llamar “caprichos” o administrarlo correctamente para no acabar endeudandonos por querer tener más de lo necesario y útil.
4. Invertir en lo mismo que hacen los demás
Muchas veces cuando poseemos más dinero del que gastamos, tendemos a intentar invertirlo, siempre buscando obtener beneficios claro. Pero una vez en este punto no es buena idea fiarse de las decisiones financieras de otros, pues algunas inversiones pueden acabar acarreando deudas y no ganancias.
A menudo es difícil distinguir lo que es prudente y mejor para nosotros mismos de lo que es simplemente popular. Es decir, muchas veces “seguir al rebaño” no es la mejor opción.
5. Los gurús financieros dan los mejores consejos
En este caso es como todo, un “gurú” sabe mucho sobre un tema, y dará consejos acorde con ese tema, pero cada persona es única y su situación personal en un momento determinado también. Aquí se deben considerar varios factores como metas, edad de la persona, tolerancia al riesgo y un largo etcétera.
Como dice Baker, es bueno buscar asesoramiento, pedir opinión a los amigos y demás, pero es muy importante ser cauteloso y pensar con cabeza.
6. No es necesario mucho esfuerzo para saber manejar el dinero de forma eficaz
Para finalizar retomaremos una de las primeras frases de este artículo, concretamente la de la influencia de Hollywood en nuestras creencias sobre el dinero. Muchas veces parece que haya gente que gane dinero sin más, como de la nada, y que sea tan fácil ganarlo como administrarlo.
Ojalá, ¿no? Evidentemente esto no es así, pues el manejo del dinero existe un compromiso real y mucha atención a los detalles, como dice Baker:
“Se trata de sentarse y mirar todos los usos del dinero de tu vida, como las facturas, los hábitos del gasto y las metas. Es un gran error para una persona que vive en familia hacer cualquier cosa con el dinero sin consultar a su pareja. Y, `por supuesto, es necesario poner un poco de atención a las finanzas todos los días”
Respecto a este último punto, si poseéis un smartphone, sabréis que existen varios tipos de aplicaciones que nos facilitan mucho la tarea de saber cuanto y como hemos gastado nuestro dinero, obteniendo así un control sobre eso y pudieron hacer los cambios necesarios en nuestra rutina si lo que queremos es ahorrar o gastarlo de forma más eficaz.
Y esto es todo por hoy, ¿conocéis alguna creencia errónea más? Os invitamos a compartirla en los comentarios.
Vía | PsychCentral.