Casualidades de la vida. Ayer mismo mi compañero Fran os hablaba de usar Google Street View para ayudar en la conservación de las especies. Hoy no usaremos Google Maps como tal, pero el programa del que os hablaré es algo similar, solo que no usaremos calles, sino reacciones metabólicas dentro del cuerpo humano.
Sabemos bastante sobre las reacciones que se producen dentro de nuestro organismo (digo bastante y no “mucho” porque en medicina nunca lo sabes, ni lo sabrás, todo). Sabemos más o menos en que lugar del cuerpo se producen, y más o menos como funcionan. El problema, para los expertos, es que todo este conocimiento vendría a ser similar a tener las coordenadas de la Tierra pero sin poseer un mapa por el que guiarnos.
Imaginad por un momento una especie de “Google Street View” dentro del organismo humano, navegando por cada una de las reacciones metabólicas. Impresionante, ¿no? Pues eso es lo que quiere conseguir un grupo de expertos internacional con el programa llamado Recon 2.
Así describen la situación actual y futura estos expertos en la revista Nature Biology:
“Los modelos del metabolismo representan solo una parte de nuestro conocimiento, donde solo se superpone parcialmente el contenido. Es como tener las coordenadas de todos los coches de la ciudad pero sin ningún mapa para guiarnos. Sin esta herramienta, no sé por qué la gente se mueve como se mueve”
Al menos eso es lo que opina uno de los autores del estudio, Bernhard Palsson, profesor de bioingeniería de la University of California San Diego Jacobs School of Engineering. Así que se han puesto manos a la obra para reconstruir con una elevada calidad un modelo del metabolismo, el más completo hasta la fecha, actualizando a su predecesor, Recon 1.
La idea final es poder navegar por nuestro sistema metabólico como si estuviéramos usando los conocidos mapas de Google, en plan “Street View”. Al conseguir este tipo de vista dentro de la gran red de genes y sus respectivos productos (enzimas, hormonas, nutrientes), se podría tener una visión de cerca de la amplia gama de fenómenos biológicos, incluyendo el desarrollo de enfermedades y los fármacos necesarios para curarlas o para que dejen de producirse.
Por otra parte, Ines Thiele, otra de las investigadoras de la Universidad de Islandia, comenta que imagina un futuro en el que los médicos puedan desarrollar modelos virtuales de las redes metabólicas de sus pacientes, de forma individual, para poder identificar el tratamiento más eficaz para cada una de sus enfermedades. Porque, como nos suelen decir en la facultad, “no hay enfermedades, hay enfermos”. Cada persona es un mundo, y reacciona a una enfermedad o a un medicamento de forma totalmente diferente a otra.
“Esto no será diferente a cómo podemos obtener una vista de la calle o de una vivienda, o a alejarnos para ver como se adapta una casa a su barrio, ciudad, estado, país o al mundo. De la misma forma que los mapas de Google reunen un amplio conjunto de datos (imágenes, direcciones, calles, flujo de tráfico) en una herramienta fácil de navegar, Recon 2 reúne un amplio compendio de datos de la literatura publicada y los modelos existentes de procesos metabólicos”
Finalmente, aunque los investigadores están muy contentos respecto a Recon 2, la realidad es que mapear el metabolismo humano no es nada fácil. En la actualidad, de los 20.000 genes que codifican proteínas en el cuerpo humano, solo se han mapeado 1.800 en este “Google Maps” del metabolismo. Será un trabajo complicado, pero esperemos que llegue a buen puerto.
Vía e Imagen | CNET.