El Océano Glaciar Ártico está siendo una fuente constante de noticias ambientales, en lo que se refiere al estudio del cambio climático.
Si como ya mencionamos en Medciencia en artículos anteriores “Las algas del Ártico nos ayudan a estudiar el cambio climático”, profundizando en el estudio de esta región del planeta se pueden llegar a datos que afecten a toda la Tierra.
Novedades del Ártico
La frase que utilizamos artículos atrás de Bugs Bunny “¿qué hay de nuevo viejo?” la podemos emplear en esta sección para ver qué de nuevo hay en lo que se ha investigado sobre el Ártico.
Un equipo internacional de investigadores, liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha analizado el equilibrio metabólico del plancton del Ártico y ha demostrado que el aumento de temperaturas puede convertir esta región del planeta en una fuente de dióxido de carbono. Esta investigación ha sido publicada en la revista Biogeosciences.
Para llegar a estos datos ha sido necesario trabajar en condiciones muy duras, en campañas en completa oscuridad del invierno ártico y a temperaturas por debajo de -40ºC, según explicaba Carlos Duarte, investigador del CSIC.
Plancton en la actualidad, ¿fuente o sumidero de CO2?
De la misma forma que nos encontramos con preguntas existenciales en muchos ámbitos de la vida, en la parte ambiental y teniendo el cambio climático como telón de fondo, es necesario responder a esta pregunta.
El plancton es el conjunto de organismos de pequeño tamaño, que viven en suspensión en el agua y que constituyen los primeros eslabones de las redes tróficas.
Tal y como confirma Carlos Duarte: “resolver el papel del plancton del Ártico como sumidero o emisor de CO2 a la atmósfera es de una enorme importancia para establecer el papel de esta región del planeta en el equilibrio de carbono a la biosfera”.
A favor del sumidero
La proporción que presentan 3 elementos: carbono, nitrógeno y fósforo en el plancton, se denomina relación Redfield (en honor a Alfred C. Redfield, oceanógrafo estadounidense que halló dicha proporción) cuya fórmula es: (106:16:1). Esto quiere decir lo siguiente, por cada átomo de fósforo que encontramos en el plancton, hay 16 átomos de nitrógeno y hay 106 átomos de carbono. Redfield había determinado la relación anterior, indicando que es la que debía contener el plancton estuviera donde estuviera.
Según la Universidad de California, la proporción de absorción de carbono del plancton, es el doble de lo que se suponía, es decir, que podría actuar como receptor de dióxido de carbono. Esto ha sido publicado en la revista Nature Geoscience. Este dato ayuda en la lucha contra los gases de efecto invernadero.
Para llegar a estas conclusiones se tuvieron que realizar mediciones en lugares tan dispares como las islas Bermudas, Hawai, el mar de Bering o las costas frente a Dinamarca. Variando la latitud lo que se ha descubierto es que la relación Redfield varía en función de la latitud, y en las regiones más cálidas, y más cercanas al Ecuador, es donde proporcionalmente hay más carbono.
A favor del híbrido sumidero / fuente
Lo denominamos híbrido porque puede actuar como sumidero o como fuente, depende del momento.
Según publica en la revista Biogeosciences, el equipo liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), estudiando el Océano Glaciar Ártico, cuando finaliza el invierno ártico y la capa de hielo comienza a disminuir, la proliferación de plancton fotosintético en primavera es capaz de producir suficiente materia orgánica para alimentar a la cadena trófica durante el resto del año. Así, el plancton hace que el océano, ejerza el papel de sumidero de CO2.
Según el mismo equipo, en otra región estudiada (islas Svalbard, Noruega), el plancton se convierte en fuente de dióxido de carbono a la atmósfera, cuando la temperatura excede de 5ºC, cifra que posiblemente alcance esa región en las próximas décadas.
Cuando sube la temperatura aumenta la respiración del plancton, lo que hace que la respiración prevalezca sobre la fotosíntesis y el plancton se convierta en una fuente de CO2 a la atmósfera.
Concluyendo
Hay datos que apoyan la teoría de que el plancton puede actuar como sumidero, recibiendo el dióxido de carbono y echándonos una mano en la lucha contra el cambio climático, y hay datos que apoyan la teoría de que el plancton puede actuar como fuente, emitiendo este gas de efecto invernadero, haciendo que la temperatura del planeta se incremente más.
Evidentemente tienen que continuar las investigaciones, para concluir una opción u otra. Lo interesante, es que no por el hecho de que un equipo haya probado una hipótesis (la opción sumidero de CO2), el resto de equipos haya ido por el mismo camino, y así se ha comprobado que en según qué circunstancias el plancton también puede actuar como emisor.
Se hace ciencia, descartando todas las hipótesis posibles, y no dando nada por supuesto.
Fuentes: Biogeosciences y Nature Geoscience
Imagen: BBC