El tiroides regula multitud de procesos en nuestro organismo por medio de las hormonas que este órgano libera a la sangre. Como consecuencia de ello, cuando se alteran los niveles de hormonas tiroideas en nuestra sangre, los síntomas pueden ser de lo más variopinto. Aquí te ofrecemos una lista de 10 síntomas que pueden aparecer si hay algún problema relacionado con el tiroides.
1. Niveles alterados de colesterol
Los niveles de colesterol están controlados por multitud de factores, no solo por la cantidad de grasas que consumes. De hecho, si tienes el colesterol alto aun realizando una buena dieta y ejercicio físico, tal vez se deba a un problema de las hormonas del tiroides.
2. Dolores articulares y relacionados con los nervios
Diversos estudios científicos han demostrado que tanto unos niveles bajos de hormonas tiroideas como unos niveles altos, pueden producir dolores en algunas articulaciones como la muñeca y alteraciones relacionadas con el sistema nervioso. Por ejemplo, este último se puede poner de manifiesto como una sensación de hormigueo en algunas personas.
3. Enfermedades del corazón
Las hormonas del tiroides regulan una gran cantidad de procesos en nuestro cuerpo. El corazón es otro órgano en el que intervienen estas hormonas, de ahí que estudios recientes hayan demostrado que los pacientes con unos niveles bajos de hormonas tiroideas tienen mayor probabilidad de padecer enfermedades relacionadas con el corazón.
4. Uñas frágiles
Unas uñas frágiles pueden esconder trastornos relacionados con el tiroides. Si tus uñas se rompen con relativa frecuencia y son muy frágiles, es posible que se deba a unos niveles bajos de hormonas tiroideas.
Por el contrario, en las enfermedades en las que hay una mayor concentración de hormonas tiroideas, las uñas pueden tener un crecimiento anormal.
5. Ansiedad y alteraciones del humor
Las hormonas tiroideas también regulan nuestro estado de ánimo. Un exceso de hormonas tiroideas pueden originar ansiedad, mientras que un descenso de estas hormonas pueden deprimir nuestro estado de ánimo.
6. Pérdida o ganancia de peso inexplicable
El tiroides interviene en el control de nuestro metabolismo. Por ello, un aumento repentino de peso o una pérdida del mismo puede deberse a una alteración de los niveles en sangre de las hormonas tiroideas.
7. Fatiga crónica
La fatiga puede encontrarse en multitud de enfermedades, por lo que es muy inespecífica cuando aparece. Los trastornos del tiroides pueden ser una de las posibles causas que expliquen esa fatiga que puede pasar desapercibida fácilmente.
8. Un bajo apetito sexual
Las hormonas tiroideas también se encuentran implicadas en la regulación de nuestra líbido, por lo que no es de extrañar que cuando exista una alteración en los niveles de estas hormonas, pueden ocurrir problemas relacionados con la fertilidad. En las mujeres, los ciclos menstruales pueden verse alterados ante una disminución o un incremento de estas hormonas.
9. Molestias intestinales
Si experimentas problemas intestinales, como diarrea o estreñimiento, y se ha descartado otras enfermedades que puedan explicar el cuadro, es posible que las hormonas del tiroides estén detrás de estas molestias intestinales.
10. Debilidad
La debilidad se encuentra íntimamente relacionada con el punto 7 de esta entrada, con la fatiga crónica. Como ya hemos comentado anteriormente, unos niveles alterados de hormonas tiroideas pueden ocasionarnos una sensación de debilidad.
En definitiva, si algunos de estos síntomas que hemos mencionado perduran en el tiempo a pesar de los diversos tratamientos que se hayan intentado, no es mala idea pensar que podemos estar ante un problema relacionado con las hormonas tiroideas.
Fuente: Global Healing Center