El acetaminofén o paracetamol se ha venido utilizando durante décadas por millones de personas para tratar la fiebre y aliviar el dolor leve. De entre los efectos secundarios más conocidos se encuentra la afectación del hígado cuando éste se toma en altas dosis. A veces la gravedad es tal que se requiere un trasplante del órgano. De hecho, la sobredosis de paracetamol es la causa de una quinta parte de todos los casos de insuficiencia hepática aguda que llevan a la necesidad de un trasplante.
Un estudio acabado de publicar en la revista British Journal of Clinical Pharmacology ha analizado la afectación de insuficiencia hepática aguda en Europa, y los resultados son bastante alarmantes para el Reino Unido e Irlanda (en el último país se registra una tasa hasta 50 veces mayor en comparación con Italia). Las estadísticas sobre población y diferencias en los trasplantes hepáticos entre países con respecto a la sobredosis de paracetamol no se habían descrito aún en ningún trabajo.
Para el estudio, científicos de la Universidad de Bordeaux (Francia) han comparado en un período de 3años (desde 2005 hasta 2007) los datos de siete países europeos: Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Países Bajos, Portugal y el Reino Unido. Los resultados muestran diferencias muy grandes entre países. Italia es el país con menor número de casos de trasplante por paracetamol, e Irlanda el que más. La tasa promedio de trasplantes por insuficiencia hepática aguda en los siete países europeos analizados era de un caso por cada 6.000.000 de habitantes al año.
Ya con más detalle, la sobredosis de paracetamol provocó una media del 19% del total de trasplantes en los países participantes, pero las tasas variaron considerablemente: 52% en Irlanda (¡más de la mitad!), 28% en el Reino Unido, 18,0% en Francia, 8% en los Países Bajos y el 1% en Italia. No se encontraron casos ni en Grecia ni en Portugal. Con respecto al género, fueron las mujeres las que requirieron más trasplantes (61%).
Lo notable del estudio ha sido que los autores no han encontrado ninguna relación aparente entre el uso de paracetamol y el riesgo de trasplante por sobredosis. Por ejemplo, el índice de consumo más alto se dio en Francia (51,5 toneladas por millón de habitantes), y el más bajo en Portugal (3,5 toneladas por millón de habitantes), mientras que los países con más y menos afectación de trasplantes fueron Irlanda e Italia, consecutivamente.
Los investigadores reconocen que las razones de estas diferencias “no están claras”, pero que en todo caso los resultados muestran la necesidad de ofrecer indicaciones para la prevención. Lógicamente, pero, habría que estudiar las causas subyacen a dichas diferencias.
¿Farmacia o tiendas?
Casual o no, en los países donde la compra de paracetamol está disponible en cualquier supermercado, los casos de trasplante hepático son mucho más numerosos que los que se dan en otros países, como Italia, Grecia o la propia España, donde su venta está regulada. Es claro que los farmacéuticos pueden cumplir un papel importante a la hora de asesorar sobre el consumo responsable de los medicamentos, lo que probablemente no se da cuando la venta no está regulada.
Otros efectos secundarios
Más allá de la afectación hepática, el paracetamol se ha relacionado también con tres enfermedades en la piel cuyos síntomas pueden incluir erupción, ampollas y, en el peor de los casos, daños a la superficie. Otros efectos adversos apuntan a las mujeres embarazadas y a un posible mayor riesgo de que los niños sufran asma en los primeros años de vida.
Fuente | ElMundo