Como sabréis la diabetes tipo 2 es una enfermedad crónica que aparece, generalmente, en personas sedentarias y con una acumulación de grasa abdominal notable. Además los antecedentes familiares y la carga genética juegan un papel destacado en su aparición, siendo habitual que los familiares directos de personas con diabetes tipo 2 acaben también padeciéndola en algún momento. Es por ello que las personas con familiares cercanos que sufren esta enfermedad, deberían actuar para evitar su aparición.
Ya se sabía que el entrenamiento con pesas mejoraba la sensibilidad a la insulina y ofrecía grandes ventajas a aquellas personas con diabetes tipo 2. Ahora sabemos que también puede ser una medida preventiva gracias a un estudio prospectivo publicado recientemente en la revista JAMA que ha asociado el entrenamiento con cargas con un riesgo significativamente menor de diabetes tipo 2. Además, sugiere que combinar los ejercicios de pesas con entrenamiento aeróbico ofrece todavía mayores ventajas.
Así, según la investigación, los hombres que realizan un entrenamiento con pesas regularmente, por ejemplo, durante 30 minutos por día, cinco días por semana, pueden ser capaces de reducir el riesgo de diabetes tipo 2 hasta en un 34%. Y si se combinan entrenamiento con pesas junto con ejercicio aeróbico como correr, el riesgo puede reducirse hasta un 59%. Estos resultados sugieren que el entrenamiento con pesas parece conferir beneficios significativos, independientes de ejercicio aeróbico (aunque junto con ejercicio aeróbico estos beneficios aumentan). Es por ello que el entrenamiento con pesas puede ser una alternativa valiosa para la prevención de esta enfermedad crónica. Muchas personas tienen dificultad para adherirse sus entrenamientos de ejercicio aeróbico.
Anders Grøntved, autor principal de la investigación, comenta al respecto:
Estos nuevos resultados nos hacen ver que el entrenamiento con pesas, en gran medida, puede servir como una alternativa al ejercicio aeróbico para la prevención de la diabetes tipo 2
El estudio en sí, observó durante 18 años (de 1990 a 2008) a 32.002 hombres y se obtuvo la información sobre el tiempo que dedicaban al entrenamiento con pesas a través de cuestionarios que rellenaban cada 2 años. Tras ajustar diversos factores como tabaquismo, consumo de alcohol, antecedentes familiares de DM2 y una serie de factores dietéticos, los resultados mostraron que incluso una modesta cantidad de entrenamiento con pesas puede ayudar a reducir el riesgo de diabetes tipo 2. Se clasificaron a los hombres según el tiempo semanal dedicado al entrenamiento con pesas en: 1) de 1 a 59 minutos; 2) de 60 a 149 minutos; 3) más de 150 minutos y se halló una reducción del riesgo de 12%, 25% y 34% respectivamente.
Es probable que estos resultados se obtengan gracias al aumento de masa muscular y la sensibilidad a la insulina que genera el entrenamiento con pesas. Aún así, al tratarse de un estudio prospectivo, Grøntved afirma que se necesitarán más estudios para confirmar los resultados, así como para analizar si pueden ser también trasladados a las mujeres.
Vía| ScienceDaily