Seguro que todos habéis visto por ahí, en alguna de vuestras redes sociales, la típica noticia que afirma que, según la ciencia, dormir desnudo aporta a nuestro organismo un sinfín de ventajas. Nada más leer el titular, la mente de algunos viaja a la inmensa libertad que aporta dormir como vinimos al mundo, mientras que la de otros tantos comienza a divagar sobre lo maravilloso que es hacerlo acompañado.
Sin embargo, también hay muchos escépticos que se preguntan si se trata de una noticia sensacionalista o si realmente la ciencia respalda tales afirmaciones. Por eso, hoy os voy a contar lo que dice la ciencia.
Ventajas de dormir desnudo
Más que dormir desnudo, lo que sí que resulta beneficioso para la salud es un control adecuado de la temperatura a la que se duerme, evitando que sea muy alta. Algunos de los beneficios obtenidos son los siguientes:
Aumento de la melatonina: La melatonina es una hormona indispensable para regular procesos tan importantes como el ritmo cardíaco, el control de los ritmos circadianos, el aprendizaje y la memoria. Además, también se ha demostrado que aydua a retrasar el envejecimiento. Se segregan altas cantidades durante el sueño y se ha demostrado que uno de los factores que modulan su producción es la temperatura, por lo que dormir a una temperatura correcta nos hará sentir mejor.
Control del apetito: También existen estudios que afirman que un control apropiado de la temperatura favorece la activación de ciertas hormonas metabólicas que mantienen a raya el apetito y, por lo tanto, ayudan a perder peso.
Es beneficioso para los músculos y los huesos: Algunos científicos afirman que si evitamos temperaturas corporales elevadas mientras dormimos, nuestro organismo sintetizará una mayor cantidad de hormona del crecimiento, muy beneficiosa para tener músculos y huesos sanos y fuertes.
Combatimos el insomnio: Según la Harvard Medical School, dormir a una temperatura entre los 15 y los 19 ºC es ideal para descansar correctamente.
Se regulan los niveles de cortisol: Como ya os hemos contado en más ocasiones, esta hormona se encuentra elevada en situaciones de estrés, por lo que conviene que nuestro organismo sea capaz de controlarla. Se conoce que durante las primeras horas de sueño disminuyen los niveles de cortisol, causa por la cual es importante dormir suficiente; pero, además, también se sabe que esto ocurre aún más eficientemente si se descansa a una temperatura suave, aunque no fría.
En cuanto a las relaciones sexuales, dormir desnudo aumenta la libido por razones obvias, pero también se produce un incremento de los niveles de oxitocina, cuya secreción ha demostrado estar favorecida por el contacto piel con piel. Este incremento, además de dar lugar a una mayor satisfacción sexual, también ayuda a que empecemos el día con positividad.
Por lo tanto, salvo en el último caso, por lo general las ventajas de dormir sin ropa más bien se deben al control de la temperatura corporal, algo que también se puede conseguir con aire acondicionado, un pijama fresquito o quitando las sábanas de franela. Pero bueno, sea como sea, desnudo se duerme súper a gusto, así que ya sabéis, si os apetece: ¡Fuera pijamas!