Ya es bien sabido que el pescado es un alimento crucial para llevar una dieta saludable gracias a los ácidos grasos omega-3 que contienen en gran cantidad. Para conocer en mayor profundidad los beneficios del pescado en nuestro cerebro, la Universidad de Pittsburgh School of Medicine de Pennsylvania ha realizado un estudio para saber cómo debemos comer el pescado.
Cuando hablamos de mantenernos en forma, casi siempre se nos viene a la cabeza estar delgado, atlético y ser capaz de realizar cualquier actividad física. Sin embargo, nos olvidamos de mantener saludable el cerebro, y es vital cuidarlo.
Cuidar el cerebro significa protegernos contra enfermedades como el Alzheimer o cualquier trastorno que altere nuestras capacidades mentales. Por fortuna, la misma actividad física que realizamos para mantener nuestra línea, también sirve para cuidar el cerebro ya que aumentamos la cantidad de sangre que le llega.
Asimismo, la dieta mediterránea, entre la que se incluye el consumo de pescado, es un importante factor protector contra la demencia. Es en este último aspecto donde los investigadores de Pennsylvania han dirigido un estudio para conocer cómo hay que consumir el pescado y cada cuánto tiempo.
¿Cada cuánto tiempo hay que comer pescado para tener un cerebro joven?
Los resultados del estudio demostraron que era necesario consumir pescado al menos una vez a la semana para mantener un cerebro sano y fuerte.
¿Y cómo se traduce esto en nuestro cerebro? Muy simple, los investigadores llevaron a cabo una imagen por resonancia magnética a todos los participantes y hallaron que los que comían pescado con esa frecuencia tenían más materia gris, más rendimiento, en la región responsable de la memoria y cognición.
¿Cómo hay que cocinar el pescado para un cerebro sano?
No vale el pescado frito. Los beneficios asociados al pescado desaparecen inmediatamente cuando se cocina de esa manera debido a que esos ácidos grasos tan saludables, los ácidos grasos omega-3, se destruyen cuando se someten a altas temperaturas.
Por otro lado, el pescado al horno o a la parrilla es la mejor opción para aprovecharnos de sus ventajas nutricionales. Por tanto, nada de pescado frito.
Conclusión
Resumiendo los dos puntos anteriores, la respuesta a la pregunta que abre esta entrada sería la siguiente: hay que comer pescado al horno o a la parrilla al menos una vez a la semana para mantener un cerebro joven y sano, para protegernos de esas temidas enfermedades que menoscaban la personalidad del que la sufre.
A esto hay que añadirle un punto también muy importante que descubrieron los investigadores: los beneficios se vieron independientemente de los niveles de ácidos grasos omega-3 que tuviera el pescado. Por tanto, la cuestión radica en la cantidad de veces que se consume a la semana y en cómo se cocina.
“Nuestro estudio muestra que las personas que consumían una dieta que incluía pescado al horno o a la parrilla, pero no pescado frito, tienen volúmenes cerebrales más grandes en las regiones asociadas a la memoria y a la cognición. No se encontró una relación entre los niveles de ácidos grasos omega-3 y esos cambios en el cerebro, lo que nos sorprendió un poco”, explicó uno de los autores del estudio, James T. Becker.
Fuente: AJPM