Hoy hablaremos de la Psilocibina o psilocina, estas son las sustancias que encontramos en las setas u hongos alucinógenos (hongos psilocibios). Estas dos sustancias psicoactivas producen sobretodo alteraciones emocionales y alucinaciones. Existen más de 200 especies de hongos que contienen estas sustancias.
En otros artículos ya os habíamos comentado las posibilidades de utilizar estas sustancias como tratamiento para trastornos como la ansiedad o la depresión. La psilocibina funciona enlazándose (es un agonista) a los receptores serotoninérgicos (es una triptamina que posee una estructura química derivada del triptófano), no está muy claro cómo ello afecta al cerebro pero hoy hablaremos sobre los efectos que la droga produce en el cerebro.
Aumento de la conectividad cerebral:
En Octubre de 2014 investigadores del King´s College encontraron (mediante un estudio dedicado a ello) que el cerebro bajo los efectos de la Psilocibina sincroniza actividad entre partes del cerebro que normalmente no estarían conectadas (así se vio con técnicas de imagen que muestran mapas de la activación cerebral). La droga estimula conexiones de largo rango entre áreas cerebrales que normalmente no se producen. Esta alteración podría explicar el estado de ensueño en el que se encuentran los usuarios por el consumo. Este tipo de efectos recuerdan fenómenos como la sinestesia que parece ser una buena similitud al estado que produce esta droga. Tras el consumo la actividad y las conexiones volvían a su función normal.
Concretamente ciertos estudios han encontrado que el hipocampo y la corteza cingulada presentan a activación conjunta y más intensa (son áreas asociadas con el pensamiento emocional y la memoria).
Disminución de la actividad:
En otras áreas más específicas (tálamo y áreas encargadas de la transferencia de información) la activación disminuye. Esto tiene sentido con el punto anterior ya que estas áreas son las encargadas de filtrar la información, actúan como compuertas que normalmente limitan las conexiones, si estas áreas funcionan en menor forma (bajo el efecto de la droga) la información es capaz de pasar de forma más libre.
Alteración de la actividad:
Se ha encontrado también que esta sustancia produce una actividad cerebral superior (relacionada con el sentido de autoconciencia) descoordinada o desconectada.
¿Puede producir cambios permanentes?
Los “viajes” bajo los efectos de esta droga podrían producir cambios permanentes en la personalidad del que las consume. Los estudios han encontrado cambios en la personalidad (el estudio siguió a los sujetos durante 14 meses) relacionados con una mayor apertura a las experiencias, mayor curiosidad, mayor apreciación del arte y de la emoción. Hay que tener en cuenta que el cambio no es producido por la droga en si, sino por la experiencia transcendental, por el “viaje” en sí, siendo descrita por los que la han probado como una de las experiencias más relevantes de su trayecto vital. Hay que considerar pero que estos estudios son limitados y que se controlan muchos factores para evitar un “mal viaje”, tal vez haciendo que los resultados no sean muy generalizables.
Curiosidades:
Los efectos pueden durar entre 3 y 8 horas aunque para el que la consume puede parecer más tiempo dado que se altera la percepción del tiempo. Los efectos comienzan entre 10 y 40 minutos después de la toma.
La toxicidad de la droga es baja, no se documentan dosis letales. Se especula, extrapolando datos con ratas, que la dosis letal sería de 1,7 kg de setas secadas o 17 kg de frescas, una barbaridad vamos. Es importante pero no equivocarse de hongo porque los hay de aspecto similar que són letales, así mismo aunque la droga no cause la muerte, la conducta causada por las alucinaciones bajo sus efectos si puede ser peligrosa. Uno puede llegar a saltar por una ventana creyendo que está en otro lugar por ejemplo.
Los hongos se reproducen por esporas que son transportadas por el viento, pero lo increíble es que algunas especies son capaces de crear su propio viento, ¡Como oyes! Para hacer esto el hongo aumenta la tasa a la que el agua se evapora de su superficie, de esta manera se crea vapor de agua alrededor de la seta. El vapor de agua junto al aire frío que crea el mismo sirve para elevar las esporas ¡hasta 10 cm!
Otro aspecto interesante es que estos hongos no producen adicción ni síndrome de abstinencia, aunque si tolerancia (a corto plazo). Es decir no hay adicción física, pero está claro que uno puede quedar “enganchado” a sus efectos psicodélicos, mentales y emocionales. Este patrón de activación es similar al que se produce durante el sueño.
Los efectos de la psilocibina pueden ser revertidos con fármacos como la risperidona o la ketansarina (antagonistas de los receptores serotoninérgicos que utiliza esta droga).
Fuente: Livescience, Livescience, Livescience, Reuters, Science Daily, Wikipedia.
Imagen: Wikimedia Commons.