Muchos papás y mamás llegan a la consulta con la pregunta de ¿Me tengo que preocupar por el amigo imaginario que tiene mi hijo/a?. Lo cierto es que la mayoría de niños alrededor de los tres años de edad, tienen amigos imaginarios, hablan con ellos, juegan juntos y todo esto sin que nosotros, los adultos, ni siquiera les podamos ver, y es genial, los niños ya empiezan a practicar para cuando tengan que iniciar amistades reales. Todo forma parte de la imaginación y de ese mundo mágico que solo los niños son capaces de vivir, como adultos lo único que tenemos que asegurarnos es de preguntarles si ese amigo les trata bien, les gusta, en que le ayuda su nuevo amigo, para saber que es lo que el niño a través de este nuevo amigo nos quiere expresar. De todas formas, podemos desde la psicología infantil afirmar que es una fantasía totalmente normal e inofensiva en la vida de los niños.
Beneficios de que los niños tengan amigos imaginarios
1. Mayor creatividad: Hay estudios que señalan que los niños que tienen amigos imaginarios serán más hábiles en cuanto a la creatividad.
2. Son niños más sensibles: Y son niños que están más conectados con la fantasía y la imaginación.
3. Permite que el niño aprenda a relacionarse: Como comentamos anteriormente, es un ensayo a las futuras amistades que tendrá, además sirve para que aprenda a relacionarse con el mundo utilizando el juego y la imaginación, elementos imprescindibles para un adecuado desarrollo.
4. Permite exteriorizar lo que piensan/sienten: A través de lo que hablan con su amigo invisible, también les ayuda a formar ideas sobre lo que quieren de una amistad, es normal también verles utilizar un comportamiento egoísta de querer mandar o elegir ellos el juego.
5. Desarrollo de la inteligencia emocional: El niño coloca sus propias emociones en la piel del amigo imaginario y así aprende a diferenciarlas.
6. Permite a las mamás y papás educar a través del amigo imaginario: “Vamos a enseñarle a tu amigo a …” “Tu amigo ya ha acabado de cenar“, ayuda a implantar nuevas normas y a fomentar una correcta autoestima en el niño.
Si pasado el tiempo y a pesar de que el niño ya está en el colegio, sigue junto a él el amigo imaginario y además no se sociabiliza con sus compañeros, si tiene una conducta retraída podría transformarse en un problema. Al igual que si su amigo imaginario se tornan violento o si el niño sólo quiere jugar con él y no con el resto de amigos reales. En ese caso se debe consultar a un especialista.