La marihuana es una mezcla gris verdosa de hojas, tallos, semillas y flores secas procedentes de la planta, Cannabis sativa. La principal sustancia activa que la caracteriza es el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC), causante de la mayoría de los beneficios de la marihuana conocidos al incorporarse rápidamente desde los pulmones al torrente sanguíneo, a partir del cual podrá ser transportado al resto del cuerpo.
Mientras que la marihuana se ha empleado exitosamente con fines terapéuticos, su consumo de forma crónica ha demostrado reducir de forma progresiva la corteza orbitofrontal, área del cerebro encargada del procesamiento de las emociones y de la ambición.
Libre de efectos secundarios perjudiciales
El estudio se llevó a cabo por el equipo de investigadores de la University of East Anglia, en colaboración con la University Pompeu Fabra en Barcelona. El impulsor del esta iniciativa fue el conocimiento de las propiedades psicoactivas del cannabis, y los logros obtenidos frenando el crecimiento de tumores.
Los últimos avances, publicados en PLOS Biology, muestran como los efectos cognitivos del THC se producen por una vía paralela a la del resto de efectos. En dicha vía, participan un receptor cannabionoide y uno para la serotonina. Cuando se bloquea, el THC puede seguir mitigando el dolor sin comprometer la pérdida de memoria.
Se ha llevado a cabo en ratones, en los que se obtuvieron los resultados esperados. Los investigadores esperan que estos resultados se mantengan en las pruebas con seres humanos, cuidando sobretodo la aparición de cambios de humor, percepción o memoria.
Beneficios de la marihuana: Tratar ansiedad, dolor o nauseas
El Doctor Peter McCormick, de la UEA’s school of Pharmacy nos cuenta:
“El THC es el componente más activo de la marihuana, y su uso terapéutico ha mostrado ser eficaz frente a síntomas como nauseas, ansiedad o dolor, y de forma especial, reduciendo el tamaño del tumor en algunos pacientes con cáncer. Sin embargo, también induce algunos efectos no deseables, que son los que intentamos omitir con nuestro trabajo”
La ausencia del receptor de serotonina 5HT2AR reduce algunos de los efectos del THC pero ninguno relacionado con la pérdida de dolor. De esta forma concluyen que la investigación servirá para reconocer si en algún otro caso, es posible eliminar nos efectos no deseados inalterando el necesario.
No debemos olvidar que el efecto se consigue vía fármaco, y no mediante la elaboración de un producto que te permita obtener dicho beneficio al ser fumado. Como dice McCormick, esperemos que en un futuro no muy lejano se pueda emplear estos conocimientos para mitigar el dolor de pacientes a los que no se les puede ofrecer otra alternativa.
Fuente | UEA