Muchas veces nos presentan a alguien y hay algo en ellos que nos da mala espina o que al contrario hace que nos caigan enseguida bien. A veces son cosas que nos recuerdan a nosotros mismos, otras veces son cosas que asociamos con cierto tipo de personas que no nos gustan, otras veces no tenemos ni idea de que es lo que tiene esa cosa pero nos pone los pelos de punta. Causar una buena impresión es clave al conocer gente nueva, buscar trabajo o simplemente para tener un entorno social rico. Pero muchas veces no sabemos cuánto de quienes somos o la apariencia que tenemos utilizan los demás para crearse esa primera impresión. Pues bien, el 70% de la información que reciben los demás de nosotros no se basa en lo que decimos sino en cómo sonamos, como nos movemos o que apariencia tenemos. Hoy vamos a enumerar las cosas más características que llaman la atención y en las que se suelen basar los demás a la hora de “juzgarnos” y crearse una idea de nuestra personalidad y de cómo somos. Y es que no nos gusta la incertidumbre y cuando no conocemos a alguien buscamos indicios que nos indiquen como es esa persona (que representa para nosotros) en aquello que podemos ver.
Cosas que informan de nuestra personalidad a los demás:
- La escritura: Podríamos enumerar estudios que dicen que si la letra pequeña denota timidez y meticulosidad, mientras que la gente extrovertida busca llamar la atención con estilos de escritura más grandes, la gente que se toma las cosas en serio aprieta más que la que no o que los que aprietan poco son más sensibles o empáticos. Yo creo que luego cada uno juzga la escritura como quiere pero es cierto que nos fijamos. ¿Os acordáis cuando eráis más jóvenes como siempre se decía “ai que letra más guapa tienes”? o “escribes como un médico” o “eres un desordenado escribiendo” o “tienes letra de chica”, ahí veis claramente la cantidad de inferencia que obtenemos de algo tan personal como el estilo de escritura.
- El color que llevamos puesto: Es frecuente que pensemos que la gente que lleva colores vivos es más extrovertida y alegre, que los que llevan colores oscuros siempre son menos accesibles o que la persona que siempre viste igual es monótona. Cómo nos vestimos dice mucho de nosotros a los demás.
- Morderse las uñas: Las conductas centradas en el cuerpo y repetitivas dan mucha información a los demás. Morderse las uñas es la más frecuente y suele indicar a los demás nerviosismo, aburrimiento, insatisfacción o impaciencia (nunca nada bueno), pero también están las de tocarse el pelo, rascarse la nariz, crujir los huesos, etc… Hay gente a la que ciertas de estas conductas le repelen y otros las consideran indiferentes.
- Los zapatos: Hay un motivo por el que en el mundo de la moda se centra tanta atención en ellos, ciertamente los zapatos que lleva uno pueden llegar a decir mucho de cómo uno es. El estilo del zapato, el color, el estado en el que se encuentra, etc… Nos dan información del nivel económico, la edad e la persona, su personalidad, etc…
- Los ojos, ¡por supuesto! Los ojos son el espejo del alma por algo y es que pueden expresar lo que pensamos y lo que sentimos en un segundo. Luego evitar el contacto ocular o mirar fijamente son cosas con las que los demás perciben gran información y por supuesto está el lado estético del ojo, los colores, la intensidad de los detalles, el tamaño, etc… Todo ello atraernos o alejarnos de una persona.
- La puntualidad: Este punto está claro, llegar tarde crea una mala imagen de nosotros en los demás, de falta de interés y responsabilidad o de desconsideración. Mientras que ser puntual o llegar pronto dice que somos organizados y considerados con el tiempo del otro.
- El apretón de manos: Un apretón débil o tímido puede decir mucho al igual que un apretón excesivamente fuerte o dominante, y lo mismo ocurre con dar dos besos a alguien o un abrazo, todo saludo implica mucha información (extraversión, confianza, autoestima, seguridad) y es el primer gesto hacia los demás en el que se fijan.
Así que ya sabes si quieres causar una buena impresión (o intencionadamente crear una por algún propósito) el truco está en asegurarte que estas 7 cosas las tengas trabajadas para que indiquen lo que quieres que los demás vean. Y sino fíjate la próxima vez que veas a alguien que ya conoces, cuántos de estos 7 aspectos puedes ver que realmente coinciden con la personalidad de la persona. Realmente es fascinante.
¿Se os ocurre alguno más que añadir a la lista?
Fuente: Lifehack.