Dejar de fumar no es fácil, aunque sabemos las consecuencias de este mal hábito y los beneficios de dejarlo. Por desgracia, una vez nos armamos de voluntad, existen algunos “efectos secundarios” no deseamos que pueden ir en nuestra contra: Aumento de peso o ansiedad, entre otros. Precisamente respecto a este último, la ansiedad en ex-fumadores, parece tener su propio circuito cerebral. O al menos así lo afirma una investigación conjunta entre la Universidad de Massachusetts y el Instituto de Investigación Scripps.
El circuito cerebral de la ansiedad en ex-fumadores
El hallazgo es un avance prometedor para todos aquellos fumadores que decidan dejar el vicio, pues saber y conocer este circuito cerebral que activaría la abstinencia de la nicotina, ocasionando la ansiedad, también podrá ayudar a crear nuevos tratamientos al respecto.
El estudio, publicado en Nature Communications, arroja varios descubrimientos sobre los mecanismos cerebrales que inducen la ansiedad en los ex-fumadores durante el periodo de abstinencia. La conclusión principal es que la región responsable de esto es el núcleo interpeduncular, que se activa en esta situación, desencadenando la ansiedad, y defiriendo de otra subregión también activa en el cerebro, y que ocasionaría otros síntomas vinculados a la abstinencia de índole físico como dolor de cabeza, náuseas e insomnio.
Curiosamente, en esta región denominada núcleo interpeduncular también convergen dos regiones cerebrales que estimulan las neuronas de dicha región provocando la ansiedad. Por una parte, el área tegmental ventral, que tradicionalmente se había asociado a efectos de recompensa o placer en el abuso de drogas, y la cual parece liberar un neurotransmisor (la corticotropina) cuya función es estimular esta área de la ansiedad. Por otra parte, la región del habénula medial estimularían también al núcleo interpeduncular liberando glutamato, el principal neurotransmisor excitador del cerebro, y el cual a su vez se incrementaría gracias a la corticotropina.
“Esto es importante. Podemos aliviar la ansiedad durante la abstinencia a la nicotina de dos formas, ya sea impidiendo la liberación directa del factor liberador de corticotropina, o silenciando las entradas del habénula medial hacía el núcleo interpeduncular”
En el estudio, realizado en ratones, los investigadores fueron capaz de aliviar la ansiedad inhibiendo las neuronas de esta área, algo que sugeriría que es posible hacerlo en humanos. Asimismo, ya existen fármacos actuales que bloquean el receptor de corticotropina, pues este receptor ya se había relacionado previamente con la ansiedad y la depresión.
El próximo objetivo será estudiar la interacción entre ansiedad, estrés y los circuitos de recompensa, además de la abstinencia a sustancias adictivas.
Vía | Universidad de Massachusetts.
Fuente | Nature Communications.