Sí, tal y como han leído, un grupo de paleontólogos ha descubierto el primer asesinato de la historia del que se tiene registro. Los investigadores han encontrado las pruebas del crimen en Atapuerca, concretamente en la Sima de los Huesos, una pequeña cámara situada en la base de un pozo de 13 metros de profundidad.
En la Sima de los Huesos se han encontrado una gran cantidad de huesos de animales y humanos magníficamente conservados. Se ha hallado más de 5.000 fósiles humanos y entre estos destaca un cráneo de hace 430.000 años de antigüedad compuesto por 52 fragmentos. El cráneo está muy completo y ha sido recompuesto a lo largo de los últimos 20 años.
Un cráneo con dos agujeros en el hueso frontal
Lo que llamó la atención a los investigadores fueron los dos agujeros que presentaba el cráneo en el hueso frontal. Por las características de las lesiones, los investigadores pronto sospecharon de que podía tratarse de un asesinato; sin embargo, había otras hipótesis que podían explicar la aparición de esas lesiones sin tener que recurrir al homicidio.
Por ejemplo, esas lesiones podrían ser debidas a una caída accidental del cuerpo en el agujero de 13 metros de la Sima de los Huesos. Por otro lado, es posible que fueran realizadas en un ritual religioso o incluso por canibalismo.
Las dudas se despejaron cuando analizaron el cráneo mediante imágenes en 3D que permitió determinar que las dos fracturas fueron causadas por el mismo objeto. Asimismo, las fracturas muestran orientaciones y trayectorias diferentes, por lo que tampoco se necesitaron dos golpes independientes para producirlas.
“También es posible descartar lesiones auto-infligidas o como resultado de un accidente durante la caza, debido principalmente a que las lesiones involucran múltiples golpes. En base a la ausencia de marcas de corte, otras manipulaciones post mortem (por ejemplo, el canibalismo, manipulaciones en rituales, etc.) parecen aún menos probables y más especulativas”, explican los autores del estudio.
El primer asesinato de la historia
Por tanto, la hipótesis más plausible de todas es que esas lesiones sean como consecuencia de una agresión de otra persona, unas lesiones que seguramente fueron mortales y causaron la muerte del individuo. De ser así, estaríamos ante el primer asesinato de la historia, hace 430.000 años.
Lo más increíble aún es que seamos capaces de reconstruir los hechos tras haber pasado tanto tiempo. Este individuo murió por dos golpes en la frente que le produjeron heridas mortales que acabaron con su vida. Posteriormente, fue llevado hasta la Sima de los Huesos donde fue depositado junto con otros cadáveres humanos.
Fuente: PLOS ONE