La esclerosis lateral amiotrófica (ELA) es una enfermedad degenerativa neuromuscular, pues ataca nuestras neuronas motoras. Estas últimas, van reduciendo su número conforme progresa la enfermedad causando una creciente parálisis muscular. Generalmente, esta enfermedad provoca la muerte después de un periodo de 2 a 5 años tras su diagnóstico, existiendo casos singulares como el del archiconocido Stephen Hawking, que lleva más de 50 años luchando contra la enfermedad.
El mundo que rodea las enfermedades neurodegenerativas escapa continuamente del conocimiento de investigadores en todo el mundo, que pretenden encontrar la causa a enfermedades como Alzheimer, párkinson o ELA. Pero un estudio llevado a cabo por investigadores del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa y del UAM-CSIC, ha encontrado un posible causante de la ELA: los hongos.
ADN y proteínas fúngicas
El estudio, dirigido por Luis Carrasco del CBMSO, detectó la presencia de ADN procedente de varias especies de hongos y de proteínas fúngicas en el cerebro y líquido cefalorraquídeo de pacientes que padecieron ELA. Carrasco nos cuenta con más detalle lo que publicará en el International Journal of Biologica Sciences:
Nuestros estudios sobre cortes de tejido cerebral prueban la existencia de material fúngico y corpúsculos intracelulares, a los que hemos denominado endomicosomas. Estas estructuras pueden ser detectadas mediante inmunofluorescencia, utilizando para ello anticuerpos que reaccionan específicamente con proteínas fúngicas.
Cryptoccocus spp, Malaseizzia spp y Candida albicans como culpables
Durante el experimento han conseguido identificar 3 hongos que podrían ser los causantes de esta enfermedad. Estos hongos, son muy conocidos en el campo de la medicina, pues son famosos por causar enfermedades como la meningitis, pitiriasis, o afecciones cutáneas.
Mediante análisis de inmunohistoquímica, en secciones cerebrales de la corteza frontal de pacientes diagnosticados de ELA, los investigadores fueron capaces de detectar la presencial de estos hongos (color verde) en el núcleo (azul) de estas células:
Esta investigación resuelve algunas de las incógnitas que se esconden tras el origen de este grupo de enfermedades. Junto a su equipo, Luis carrasco ha encontrado diferentes relaciones entre algunas infecciones fúngicas Alzhimer o esclerosis múltiple. Además, este caso ha mostrado que la diferente respuesta del organismo a la neuroinvasión, y la progresión de esta enfermedad depende en gran medida del genoma de cada persona y el estado de su sistema inmune.
Y no solo eso, Carrasco asegura que con el ensayo clínico adecuado, se podría determinar con total seguridad que los hongos son los culpables de la ELA, y con ello empezar a movilizar el fármaco adecuado para el tratamiento de esta devastadora enfermedad.
Fuente | CBMSO