El tabaco, junto al alcohol, es una de las drogas legales más vendida del último siglo. Conocemos de sobra sus efectos perjudiciales, y poco a poco parece que se evita más su consumo, pero demasiado progresivamente para lo que requeriría un nivel de salud aceptable. Dejar de fumar no es algo fácil, pues la cantidad de productos adictivos que contiene un cigarrillo no es nada desdeñable, aunque todos los otros productos perjudiciales tampoco lo son, y más si pensamos en una media de consumo de un paquete de cigarrillos diario durante años.
Por ello, para los que hayáis puesto voluntad en dejar de lado este mal hábito, vamos a exponer en primer lugar las razones de paso para dejar de fumar (entre los conocimientos que ya teníamos, y los nuevos estudios publicados en los últimos años), junto a algunos consejos, ayudas y tratamientos que podemos usar para dejar de fumar.
Razones para dejar de fumar
Aunque aquí vamos a hacer una lista detallada de todas y cada una de las razones por las que se debe dejar de fumar, con tan solo cualquiera de ellas por separado habría suficiente peso como para olvidar de una vez por todas esa cajetilla de cigarrillos que debes tener cerca. Pero puede que viendo todas las razones juntas, en toda su amplitud, la voluntad para llevar a cabo ese paso se active un poco más:
1. Fumar mata: Esta es la razón típica. Pero para que os hagáis una idea, en números, los datos del XLVIII Congreso de Enfermedades Cardiovasculares SEC de 2012 afirmó que el 50% de los fumadores muere por culpa del tabaco, y una de cada siete muertes en mayores de 35 años en España se debe al tabaco (en hombres, una muerte de cada cuatro).
2. Fumar provoca Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica: Otra de las razones de peso para dejar de fumar es esa tos seca que comparten muchos fumadores, la EPOC, que es 10 veces más prevalente en los consumidores de tabaco, pues este es su mayor factor de riesgo.
3. Sin el tabaco, el cáncer de pulmón sería una enfermedad rara: Los fumadores tienen hasta 20 veces más riesgo de padecer cáncer de pulmón, y de los 4 tipos de este cáncer, 3 de ellos tienen relación directa con el tabaco, representando la gran parte de este tipo de cáncer.
4. El tabaco y el alcohol representan el 90% del cáncer oral: Por su parte, entre el tabaco y el alcohol llegan a representar el 90% de las causas del cáncer oral según os comentamos en el pasado Día Mundial del Cáncer.
5. Fumar provoca problemas para dormir: Según un estudio de la revista Addiction Biology, hasta el 17% de los fumadores duerme menos de seis horas, y hasta el 28% tiene una mala calidad del sueño. La nicotina se baraja como la principal razón de esto, por sus efectos estimulantes.
6. Fumar aumenta el riesgo de sufrir cataratas: Por su parte, un estudio publicado en Investigative Ophthalmology & Visual Science relacionó mediante un gran meta-análisis el tabaco con un mayor riesgo de sufrir cataratas, con la disminución de agudeza visual progresiva que esto conlleva.
7. Fumar aumenta el riesgo de dolor crónico de espalda: Así lo afirmó un estudio publicado en Human Brain Mapping, donde se llegó a la conclusión de que los fumadores podrían tener hasta 3 veces más probabilidades de desarrollar dolor crónico de espalda; y también se comprobó que abandonar el hábito reducía el riesgo de forma considerable.
8. El tabaco podría ser el mayor factor de riesgo para sufrir Alzheimer: Según un reciente informe de la OMS, tanto el consumo directo del tabaco como la exposición al humo de segunda mano aumentaría drásticamente el riesgo de demencia, incluido el Alzheimer; en un 45% más de riesgo para los fumadores directos y un 14% para los fumadores indirectos o “de segunda mano”.
9. Las nuevas enfermedades relacionadas con el tabaco: Si ya sabíamos que los componentes del tabaco dañan las arterias y el corazón, un nuevo estudio del New England Journal of Medicine empeora las cosas. Según dicho estudio, habría que relacionar más enfermedades con el tabaco, como la arteriosclerosis, la aneurisma de aorta, las infecciones, la hipertensión arterial, la miocardiopatia hipertensiva, la cirrosis e incluso el cáncer de mama. Algunas de estas enfermedades se habían relacionado de forma indirecta con el tabaco, pero dicho estudio las relaciona de forma totalmente directa.
10. Así queda tu pulmón fumador respecto a un no-fumador: Hace unos meses os representamos de forma bastante gráfica, mediante un vídeo corto, una buena comparación entre un pulmón fumador respecto al de un no-fumador. Por si os lo perdisteis, os lo volvemos a traer.
Consejos, ayudas y tratamientos para dejar de fumar
Vistas las razones, tanto a nivel teóricos con los datos en la mano, como práctico mediante un vídeo, es el momento de pasar al siguiente nivel. Ahora que ya sabemos por qué dejar de fumar es lo más sensato, veamos cómo podemos hacerlo, ¿no? Hablaremos tanto de consejos a nivel psicológico, médico y práctico, como a posibilidades de tratamientos curiosos que aún no se usan, pero que se encuentran en investigación, para que los conozcáis al menos.
1. Dejar de fumar, más fácil en lunes: Según un estudio de JAMA Internal Medicine, dejar de fumar es similar a emprender una nueva dieta, pues parece ser que el lunes es el día ideal para abandonar el tabaco, ya que las consultas en Google sobre dejar de fumar se disparaban hasta un 25% más el primer día de la semana respecto a los demás días, entre 2008 y 2012, y en todos los idiomas estudiados.
2. Parches y chicles de nicotina: Aunque es conveniente sumarse a un programa para dejar de fumar, de forma simultanea a la sustitución del tabaco por parches o chicles de nicotina, no es estrictamente necesario. Por otra parte, la cantidad de parches o chicles usados dependerá de la cantidad de tabaco que se fume; además se sabe que este tipo de terapia funciona en aquellos individuos que fuman 15 o más cigarrillos diarios, pero no se tienen datos sobre su efectividad en aquellos que fuman 10 cigarrillos o menos al día. Es conveniente llevar a cabo esta sustitución con el médico de cabecera particular, ya sea a modo de apoyo, consejo o control. Como hemos dicho al principio, dejar de fumar no es algo fácil.
3. Dejar de fumar, ¿de golpe o poco a poco?: Aunque la cultura popular afirma que para dejar de fumar lo mejor es hacerlo de golpe, recientes investigaciones con nuevos fármacos opinan lo contrario. De hecho, para se más exactos, la formula sería “depende“, pues según el metabolismo del fumador en cuestión funcionan mejor unas estrategias u otras, como bien afirma un reciente estudio de The Lancet.
Por una parte, si se elimina más lentamente la nicotina, la mejor opción son los parches anteriormente mencionados; pero por otra, si la eliminación es normal, el fármaco vareniclina.
Y, respecto a la velocidad para dejar la adicción, también “depende“. Por el momento, el Ministerio de Sanidad de España recomienda las viejas estrategias de mentalizarse y, pum, dejar el tabaco de golpe. Sin embargo, otro estudio reciente publicado en el Journal of American Medical Association afirma que el uso del fármaco vareniclina permite dejar el tabaco de forma progresiva, alcanzando tasas del 30% de éxito, que si bien parecen bajas ya son mejores que cualquier método anterior.
4. Cigarrillos electrónicos, ¿sí o no?: El pasado año hicimos un exhaustivo análisis sobre el uso de los cigarrillos electrónicos como sustituto del tabaco y con el objetivo de dejar de fumar. La respuesta a la pregunta es que aún es necesaria una correcta regulación, tanto en EE.UU. como en Europa, sobre el uso de este tipo de dispositivos. Algunas marcas sí mencionan los niveles de nicotina de cada dispositivo, e incluso dan consejos de uso y cómo ir disminuyendo las dosis de nicotina, pero muchas marcas de cigarrillos electrónicos aún no lo hacen, por lo que su uso, hoy por hoy, aún no tiene suficiente base para ser recomendados, aunque probablemente en un futuro con una regulación y estudio adecuado sí puedan ser una alternativa terapéutica de peso.
5. ¿Vacuna antinicotina?: Aunque el pasado año 2012 hablamos sobre la posibilidad de una vacuna antinicotina para 2013, la realidad es que aún no podemos obtenerla para un uso cotidiano o necesario. Se encuentra en estudio, sí, pero como ya sabéis muchos de estos ensayos clínicos tardan entre 5 y 10 años en volverse productos comerciales. De momento será necesario esperar nuevas noticias.
6. Psilocibina (hongos mágicos) para dejar de fumar: Finalmente, tenemos como posible tratamiento anti-tabaco el uso de la psilocibina, una sustancia alucinógena que se encuentra como componente esencial de las setas u hongos mágicos, que ha logrado hasta un 80% de éxito. Evidentemente en la actualidad este tratamiento no es factible, pues las investigaciones han demostrado su eficacia, llegándose a publicar en el Journal of Psychopharmacology, pero desconocemos las dosis seguras, dosis ideales y, lo más importante, las dosis tóxicas. Incluso sería posible evitar su efecto alucinógeno a la vez que se potencia su efecto anti-tabaco, pero para llegar a eso harán falta varios años de investigación.
Como conclusión, espero que las razones que hemos expuesto sean suficientemente convincentes para que digáis (o al menos penséis en ello) adiós de una vez por todas al tabaco, y que los diferentes estudios a los que hemos hecho mención y hemos analizado os puedan tanto convencer como ayudar, potenciando la fuerza de voluntad necesaria para esta gran decisión.