La ciencia no solo busca desarrollar nuevas herramientas con nuevas capacidades, sino también encontrar nuevos usos a útiles que ya disponían de un uso conocido. Siguiendo esta regla, le ha tocado el turno al cannabis, o la comúnmente conocida marihuana. Tras explorar las propiedades medicinales del extracto de cannabis, los investigadores han encontrado que la marihuana posee ciertos componentes no psicotrópicos que pueden ayudar en la reparación del hueso fracturado.
Un nuevo estudio publicado en el Journal of Bone and Mineral Research por la Universidad de Hebrew y Tel Aviv. En la investigación se llegó a la conclusión, que al administrar el componente no psicotrópico, el cannabidiol, se favorecía de forma significativa la reparación del hueso fracturado.
El estudio
Dirigido por el Doctor Yankel Gabet del Bone Research Laboratory en el Departament of Anatomy and Antrhopology de la Facultad de Medicina TAU Sackler. El estudio empezó con los receptores de cannabinoides, pues se encontró que participaban en la formación ósea, al tiempo que evitaban la pérdida ósea mineral. Con estas propiedades, los investigadores encontraron una nueva luz para tratar enfermedades como la osteoporosis.
La propiedad que ha permitido al cannabidiol conseguir estos resultados, es su poder antiinflamatorio y su caracter no psicoactivo.
El doctor Gabet afirma que nuestro cuerpo está equipado con un complejo sistema cannabinoide, que regula tanto sistemas vitales como no vitales.
” Nuestro cuerpo responde al cannabis porque posee receptores para el mismo diseñados para activarse con los compuestos presentes en la planta.”
Extrayendo los componentes
Los investigadores dividieron las ratas de laboratorio que presentaban fracturas óseas en 3 grupos, uno sin tratamiento, otro con cannabidiol y otro con tanto cannabidiol como THC. Tras analizar los resultados, se llegó a la conclusión que solo se consigue la reparación ósea cuando se emplea el cannabidiol únicamente.
Además, otros estudios han demostrado que el cannabidiol es un compuesto seguro, facilitando la puesta a punto de nuevos fármacos con esta sustancia.
Pero los beneficios no se detienen aquí, pues además de la reparación, el cannabidiol fortalecía la composición mineral del hueso, haciendo más difícil futuras fracturas. De esta forma, la línea de investigación del Doctor Gabet continúa manos a la obra con la exploración de los compuestos del cannabis, los efectos que tienen a nivel celular y el proceso que constituiría la separación entre los otros compuestos.
Próximamente se comprobará su efecto en humanos, y se espera que el diseño del fármaco llegue a tiempo para tratar las enfermedades e injurias óseas que afectan a la población.
Fuente | Tel Aviv University