Está comprobado que las mujeres viven una media de 4 años más que los hombres. Hasta ahora pensábamos que esto se debía a que ellas se cuidan más, mantienen una dieta y un estilo de vida más saludable, etc… pero recientemente científicos de la Universidad Monash en Australia y la Universidad de Lancaster, Inglaterra, nos han descubierto el que podría ser el principal factor determinante para esta mayor longevidad.
El estudio realizado por estos científicos y publicado en la revista Current Biology, analizaron la mitocondria de 13 grupos distintos de moscas de la fruta machos y hembras. Los resultados revelaron mutaciones en el ADN mitocondrial que parecen marcar la diferencia en la longevidad de mujeres y hombres.
“Una diferencia significativa en la esperanza de vida entre hombres y mujeres tiene su origen en la mitocondria. Esta diferencia no está causada por diferencias hormonales entre los sexos, como la testosterona en los hombres, o una vida con más riesgos. Es genético”
El doctor Damian Dowling, uno de los investigadores, explica que los resultados mostraron numerosas mutaciones dentro del ADN mitocondrial que afectan cuánto viven los machos y la velocidad con que envejecen. En cambio, parece que no afectan a los patrones de envejecimiento de las mujeres.
“Todos los animales poseen mitocondria, y la tendencia de las hembras de vivir más que los machos es común en muchas especies diferentes”.
“Por lo tanto, nuestros resultados sugieren que las mutaciones mitocondriales que descubrimos por lo general causarán un envejecimiento más rápido en los machos de todo el reino animal”.
Esto podría explicarse por el hecho de que el ADN mitocondrial se hereda exclusivamente de la madre, así, evolutivamente, resulta coherente que las mutaciones que tienen lugar en la mitocondria del hombre no sean biológicamente rectificadas, ya que el ADN de la mitocondria del hombre no se heredará y, por tanto, se perderá.
“Si ocurre una mutación mitocondrial que daña a los padres, pero no tiene efecto en las madres, esta mutación pasará desapercibida e inadvertida por la selección natural”
El doctor Dowling explica que ahora planea investigar cuales son los mecanismos genéticos que podrían proteger a los machos para anular los efectos de estas mutaciones perjudiciales y lograr una vida más larga y sana.
Quizás este sea un camino hacia la inmortalidad más creible y fácil de entender que el que nos explicaba mi compañero Roberto cuando hablaba de las novedosas ideas del doctor Kenneth Hayworth, dignas de una novela de ciencia ficción (claro que también la radio o la televisión debieron parecer ciencia ficción en su momento)
De todos modos, estos científicos continúan haciendo hincapié en que hay varias otras cosas que sabemos que influyen en la longevidad, como el estilo de vida, los factores sociales y conductuales y por tanto también debemos tenerlos en cuenta.
Por otro lado, mujeres del mundo, no os emocionéis tanto, ya que se dice (no es un refrán, lo dicen estadísticas y estudios científicos) que las mujeres viven más, pero peor. Por eso esperamos que además de alargar la vida a los hombres, también estudian cómo mejorar la de las mujeres, mientras, habrá que seguir cuidándose para llegar a la vejez con buena salud para poder disfrutar de esos 4 años de más que nos regalan las mitocondrias.
Fuentes: BBC/Actualidad RT