¿Es bueno hacer ejercicio durante la gestación? Si una no se mata a correr y a hacer ejercicios de forma excesiva y vigorosa, sí. De hecho, basta con sólo 20 minutos de ejercicio moderado tres veces a la semana para mejorar el desarrollo del cerebro del niño recién nacido, según han indicado investigadores del Centro de Investigación del Hospital CHU Sainte-Justine, afiliado a la Universidad de Montreal (Canadá). Los expertos presentarán los hallazgos de su investigación en el Congreso de Neurociencia 2013, en San Diego, California (Estados Unidos).
Según los científicos, aunque estudios en animales han mostrado resultados similares, este es el primer ensayo controlado aleatorio en humanos para medir de forma objetiva el impacto del ejercicio durante el embarazo en el cerebro del recién nacido. Ellos mismos esperan y desean que estos resultados orienten las intervenciones de salud pública y la investigación sobre la plasticidad del cerebro. Asimismo, sugieren que esta investigación anime a las mujeres a cambiar sus hábitos de salud, teniendo en cuenta que el simple hecho de hacer ejercicio durante el embarazo puede marcar una diferencia para el futuro de sus hijos.
Los investigadores decidieron llevar a cabo el estudio a partir de la idea inicial de que mucha bibliografía científica ha constatado que el ejercicio es beneficioso para el cerebro del adulto. Su hipótesis fue, por tanto, que la actividad física también podría ser beneficiosa para el niño que nace gracias a las actividades que practique la madre.
Estoy embarazada: ¿hago ejercicio o no?
Hasta no hace mucho, los especialistas aconsejaban a las mujeres que realizaran las actividades de su vida diaria con calma y que descansaran durante el embarazo. Recientemente, esta idea se ha transformado y ahora está comúnmente aceptado que la inactividad es en realidad un problema de salud. De hecho, la relación ejercicio físico-embarazo ha evolucionado con el paso del tiempo. En la actualidad existen datos que permiten fundamentar y establecer guías de actuación lógicas para la prescripción de ejercicio físico en la mujer gestante, que aseguren los mínimos riesgos y máximos beneficios.
Como indican los expertos, el sedentarismo aumenta el riesgo de sufrir complicaciones durante el embarazo, mientras que la actividad física puede facilitar la recuperación posparto, hace más llevadero el embarazo y reduce el riesgo de obesidad en los niños.
Ejercicio frente a sedentarismo
A partir del inicio del segundo trimestre del embarazo, las mujeres participantes en el estudio fueron asignadas al azar a un grupo de ejercicio o a un grupo sedentario. Las mujeres que practicaron alguna actividad deportiva tuvieron que realizar al menos 20 minutos de ejercicio cardiovascular tres veces por semana a una intensidad moderada, que debería conducir a por lo menos una ligera dificultad para respirar.
Se evaluó por electroencefalografía, que permite la grabación de la actividad eléctrica del cerebro, la actividad cerebral de los bebés entre los ocho y 12 días de nacer. Los resultados mostraron que los bebés nacidos de las madres que eran físicamente activas tienen una activación cerebral más madura, lo que sugiere que sus cerebros se desarrollaron más rápidamente.
A partir de estos resultados, los investigadores quieren ir más allá: se encuentran en proceso de evaluar el desarrollo cognitivo, motor y el lenguaje de los niños a la edad de 1 año para verificar si se mantienen estas diferencias. Y es que hay otros muchos condicionantes en la vida que pueden influir en el desempeño cerebral.
Otros trabajos en favor del ejercicio
- Una revisión exhaustiva de varios trabajos publicada en 2010 en la Revista Andaluza de Medicina del Deporte concluía que, si el embarazo transcurre sin problemas y sin contraindicaciones médicas, el ejercicio físico personalizado, combinando un programa de acondicionamiento neuromuscular con un programa de acondicionamiento cardiovascular, resulta altamente recomendado para las mujeres embarazadas, ya fueran activas o sedentarias previamente.
- Investigadores suecos descubrieron en 2005 que realizar ejercicio moderado durante la gestación reduce el dolor en la cintura pélvica (presente en la quinta parte de las embarazadas)
- Según un trabajo publicado en Annals of Behavioral Medicine, la actividad física moderada reduce el riesgo de depresión en el período prenatal, que afecta al 11% de las embarazadas.
- Varios trabajos han constatado que el ejercicio en la gestación puede reducir el riesgo de preeclampsia, es decir, de hipertensión gestacional. Se trata de una de las complicaciones más graves de la gestación (afecta a cerca de un 10% de las mujeres embarazadas).
- Se produce una reducción en el peso del bebé al nacer, lo que puede ser un beneficio a largo plazo relacionado con un menor riesgo de obesidad.
Fuente | Europra Press; El Mundo
Imagen interior | Universidad de Montreal
Imagen de portada | Tatiana Vdb