Sabemos de sobra que fumar provoca muchos, muchísimos males de cabeza. Aunque en anteriores épocas se veía como una moda, un lujo, o una forma de vida, en la actualidad sabemos que el tabaco es uno de los principales causantes de varios tipos de cáncer (boca, garganta, esófago, pulmón, vesícula urinaria…), causante de varios tipos de enfermedades pulmonares, e incluso factor de riesgo a nivel cardiovascular. Pero, si no teníamos suficiente con todo esto, un gran meta-análisis ha descubierto que también esta asociado a la aparición de cataratas.
Esto es lo que afirman los hallazgos conseguidos por un equipo de científicos en China y publicados en Investigative Ophthalmology & Visual Science.
“Aunque las cataratas pueden ser extraídas quirúrgicamente para restaurar la vista, muchas personas llegan a quedarse ciegas por ellas, debido a los malos servicios quirúrgicos o a los elevados costes de la cirugía”
Como ya sabréis, las cataratas son un tipo de enfermedad que implica una disminución progresiva de la agudeza visual porque el cristalino, la “lente” del ojo, se va haciendo opaco. Normalmente se asocian a la edad, pero algunas personas las sufren antes de lo normal (ya entre los 40 y 50 años se pueden sufrir). En España, aunque la lista de espera puede ser larga, esta cirugía es aún gratuita, pero como imaginaréis en países como China o EE.UU. no lo es, y muchas personas acaban perdiendo la vista solo por no poder pagar la operación.
Como dice Juan Ye, autor de este estudio, del Instituto de Oftalmología de la Universidad de Zhejiang de China:
“La identificación de factores de riesgo modificables para las cataratas puede ayudar a establecer medidas preventivas y reducir los recursos económicos, así como la carga clínica causada por la enfermedad”
Durante la investigación se usaron hasta 20 estudios diferentes, procedentes de África, Asia, Australia, Europa y América del Norte, para comparar la prevalencia de la catarata senil en personas fumadoras y no fumadoras. Además, se hicieron otros análisis de subgrupos basándose en si las personas fumaban o no en la actualidad.
Los resultados finales demostraron que los individuos fumadores tenían un mayor riesgo de catarata senil, con un mayor riesgo en los que fumaban en la actualidad.
Así pues, si ya hablamos hace poco de que un exceso de cafeína podría producir ceguera (y con exceso me refiero a exceso de verdad), ahora podemos añadir al saco el un aumento de riesgo por fumar. Volvemos a lo mismo, lo mejor es llevar un estilo de vida saludable, evitando tóxicos como el alcohol (en exceso, ya que su consumo moderado es beneficioso), el tabaco, las drogas, y los excesos de otras sustancias.
Vía: ARVO.