Las impresoras 3D, esas antiguamente grandes desconocidas y que día a día se va introduciendo en nuestras vidas, fuera del apocalíptico futuro para la empresas en las que los antiguos consumidores “imprimirán” sus propios juegos, piezas de recambio y todo lo que la imaginación pueda crear, por el momento sirven para ayudar a la gente en el terreno médico. Ya tenemos casos de fabricación de tejidos de sostén para las células humanas y la reconstrucción de órganos. En la noticia que compartimos hoy le ha llegado el turno al cráneo.
Un cráneo completamente fabricado en impresión 3D
En Holanda, una mujer de 22 años es la primera paciente que ha recibido un cráneo totalmente construido en una impresora 3D. Y es que aunque parezca un hecho sumamente simple, su vida ha cambiado completamente. Ha pasado de un peligro de muerte constante a poder desenvolverse en la vida cotidiana como uno más.
Este éxito se lo debemos al Hospital Universitario de Utrecht que se encuentra en Holanda, ya pionero en otras técnicas que están revolucionando el mundo médico como lo nuevos tratamientos para el cáncer de mama. Pese a que la cirugía se realizó tiempo atrás, los integrantes del equipo medicoquirúrgico han esperado a la recuperación de la paciente para compartir este nuevo avance con el mundo.
Lo novedoso es que el implante ocupa la mayor parte del cráneo, al contrario las placas de titanio que se utilizan por el momento hasta que esta tecnología, de seguir estos novedosos y buenos resultados, se implante a lo largo del mundo. Además del aspecto mencionado, otro punto fuerte es que la paciente no deberá seguir tedioso seguimiento a lo largo de su vida.
Hay que mencionar que este implante se realizo debido a un problema óseo que provocaba que el hueso mismo creciera constantemente, provocando una reducción del volumen interno y un aumento de la presión intracraneal que estaba llevando a la paciente a padecer problemas de vista y dolores de cabeza, problemas que han desparecido desde la implantación de esta medida.
Aunque el implante es de plástico, hay que recalcar que no es un plástico normal y corriente, si no que está diseñado para que pueda soportar las inclemencias de la vida cotidiana sin que se fracture y pese al temor de infección de los médicos, finalmente la recuperación de la paciente fue rápida y sin problemas.
Vía | RTVE.