Se estima que un 40% de las personas con apnea del sueño padecen diabetes. La relación entre ambas patologías aún no se conoce bien, pero lo cierto es que una apnea no diagnosticada puede interferir seriamente en el tratamiento de la intolerancia a la glucosa. De ahí la importancia de avisar a la comunidad médica de que ambas patologías deberían ser tratadas en conjunto.
Un estudio reciente ha hecho un importante paso adelante con respecto al conocimiento de la relación entre estas dos afecciones. En el mayor estudio hasta la fecha sobre el tema, investigadores de la Universidad de Toronto han constatado recientemente la relación entre la apnea obstructiva del sueño (AOS) y el desarrollo de diabetes. Este trabajo confirma los indicios previos de esta relación que se habían detectado en estudios con períodos de seguimiento más cortos. Este estudio, publicado en la revista American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine, tiene un tamaño de muestra más grande y una mediana de seguimiento de 67 meses, de modo que abordó algunas de las limitaciones de estudios previos.
La conclusión más importante ha sido que, al parecer, entre los pacientes con AOS, la gravedad inicial de la enfermedad podría predecir el consiguiente riesgo de diabetes.
Cese del flujo de aire y diabetes
El estudio incluyó a 8.678 adultos con sospecha de AOS sin diabetes al inicio del estudio. Todos ellos se sometieron a un estudio de diagnóstico del sueño entre 1994 y 2010. También se hizo un seguimiento hasta 2011 para examinar la incidencia de diabetes. La gravedad de la apnea del sueño se evaluó con el índice de apnea-hipopnea, basada en el número de apneas (cese completo del flujo de aire) e hipopneas (cese parcial de flujo de aire) por horsa de sueño. Los pacientes fueron clasificados entre no padecer AOS (menos de 5 por hora), padecer AOS leve (entre 5-14 por hora) o moderada (entre 15-30 por hora) o, por último, padecer AOS grave (más de 30 por hora).
Durante el seguimiento, el 11,7% de los pacientes desarrollaron diabetes. En los análisis de ajuste por factores de riesgo conocidos para la diabetes (edad, sexo, índice de masa corporal, circunferencia del cuello, hábito tabáquico, nivel de ingresos y comorbilidad al inicio del estudio, los pacientes con AOS grave tenían un 30% más de riesgo de desarrollar diabetes que aquellos con son AOS. Por último, los pacientes con AOS leve o moderada tenían un 23% más de riesgo de desarrollar diabetes.
Los investigadores detectaron otros factores de riesgo para la diabetes: cese del flujo de aire durante el sueño REM (fase del sueño durante la cual se presenta la mayor frecuencia e intensidad de las ensoñaciones), y las mediciones de las consecuencias fisiológicas de la AOS, incluyendo desaturación de oxígeno, falta de sueño y activación del sistema nervioso simpático, indicadas mediante un ritmo más elevado del corazón durante el sueño.
Según los investigadores, los hallazgos que relacionaron la desaturación prolongada de oxígeno, un menor tiempo de sueño y una mayor frecuencia cardíaca con la diabetes son consistentes con los mecanismos fisiopatológicos que se sospecha que podrían ser la base de la relación entre la AOS y la diabetes.
El estudio tuvo algunas limitaciones, como la falta de datos sobre antecedentes familiares de diabetes y la procedencia étnica, así como la posible clasificación errónea de algunos sujetos, debido a las limitaciones de los datos administrativos utilizados.
Los resultados de este estudio, y de otros anteriores, destacan la importancia y la influencia en la salud de las enfermedades del sueño, que tantas veces son ignoradas.
Fuente | ScienceDaily