Se acerca peligrosamente la primavera al hemisferio norte (recordad que os escribimos desde España, y aquí ya empieza a volver el calor). Digo se acerca porque en nuestra zona aún hay días de viento y frío, pero queda menos. Y lo de peligroso va por l@s que sufráis alergias, pues la primavera es la época del año donde más se empiezan a sentir los síntomas. Sin embargo, a parte de los conocidos antihistamínicos para evitar las molestias como el picor de ojos, los estornudos o la mucosidad, existen una serie de alimentos que los estudios han respaldado para soportar mejor la situación, ¡allá vamos!
1. Yogures
Personalmente, me encantan los yogures, y eso que no sufro alergias. Pero si ese es vuestro caso, os alegrará saber que según un estudio publicado en la revista Clinical and Experimental Allergy, las personas con alergías que consumian yogures (los cuales contienen el Lactobacillus casei) tenían niveles de anticuerpos más bajos en sangre, concretamente los IgE, responsables de las reacciones alérgicas. Los investigadores creen que los probióticos, como el Lactobacillus casei, ayudan a mantener los niveles bacterianos del intestino en equilibrio, permitiendo así que el sistema inmune no reaccione exageradamente a los productos alérgenos.
2. Alcaparras
Estos pequeños capullos florales comestibles están llenos de un flavonol, la quercetina, un antiinflamatorio que también podemos encontrar en las bayas, cebollas, manzanas, verduras verdes, té o tomates, entre otros. Según las investigaciones, la quercetina es capaz de bloquear los efectos de las histaminas (las sustancias responsables de los síntomas exagerados de las alergias, como el picor de ojos). Según un estudio controlado con placebo y doble ciego publicado en los International Archives of Allergy and Immunology, las personas que consumían 100 mg de quercetina reducían sus síntomas de alérgia tras ocho semanas. Si, es tiempo, pero ya es algo. Puede que con nuevos estudios variando las dosis se pueda llegar a saber algo más.
3. Té verde
Como os comentaba en el punto anterior, el té verde contiene quercetina, pero además también podemos encontrar en esta bebida la epigallocatechin-3-gallate (EGCG), un antioxidante que ha demostrado reducir la mucosidad, según un estudio publicado en la American Journal of Rhinology & Allergy.
4. Ortigas
De la misma forma que el té, el consumo de ortigas en forma de infusión también tiene propiedades antiinflamatorias, ya que reduce la fiebre. Según un estudio de la revista Phytotherapy, la ortiga es capaz de bloquear la producción de histamina, causando así la reducción de las respuestas pro-inflamatorias responsables de las reacciones alérgicas.
Y esto es todo por hoy, ¿conocéis estudios sobre otro tipo de alimentos, infusiones o similares que puedan mejorar los síntomas de la alergía? Os invito a compartirlos en los comentarios.