Aunque en otras ocasiones os hemos llegado a hablar de algunos riesgos que pueden llegar a tener los videojuegos, debemos coger estos conceptos con pinzas, sobre todo porque tales riesgos se suelen deber al exceso. Y como ya sabéis, todo exceso es malo. Hoy seremos más positivos y os hablaremos de cosas más halagüeñas, en este caso algunos de los beneficios que pueden llegar a tener los videojuegos para nuestra salud.
1. Mejoran la atención y la toma de decisiones
Seguro que tal afirmación la habréis oído incluso por la televisión. Jugar a videojuegos de acción puede ayudarnos, y mucho, a mejorar nuestra atención e incluso a tomar mejores decisiones. Así lo afirmó un estudio llevado a cabo en la Universidad de Rochester (EE.UU.) y presentado en el 8º Congreso de la Federación Europea de Sociedades de Neurociencia.
OJO, esto solo sucede con los videojuegos de acción, donde se perciben mejor los detalles y de forma más rápida, mejorando a su vez la capacidad de tomar decisiones de forma más precisa. Los videojuegos sociales tan de moda hoy en día gracias a las redes sociales como Facebook no cuentan.
2. Mejoran la cooperatividad, la confianza y la empatía
Aunque en principio se buscaba saber la relación de los juegos violentos con su afectación al comportamiento humano, un estudio publicado en Computers in Human Behavior demostró que jugar a juegos en grupo puede mejorar la cooperatividad de los jugadores, además de su confianza en si mismos y su empatía.
Además, según otros estudios de la misma revista, la asociación entre jugar a juegos violentos y el futuro comportamiento violento de los jugadores no es tan fuerte como se pensaba, ya que influyen múltiples variables en dicho comportamiento. Es decir, el videojuego en si, por si solo, no hace que nuestro comportamiento sea más o menos violento.
3. Incrementan la rapidez de reflejos, la agudeza visual y la búsqueda visual
Esta característica de los videojuegos ya se usa en algunos hospitales con los miembros responsables de las áreas de cirugía, ya que una buena rapidez de reflejos y una buena agudeza visual son esenciales para tales tareas. Uno de los estudios que lo demuestra se llevo a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad de Toronto, en Canadá.
4. Se han relacionado con un mayor nivel de felicidad en los ancianos
Pues si, según un estudio llevado a cabo por la Universidad Estatal de Carolina del Norte, tras llevar a cabo una serie de test y encuestas, llegó a la conclusión de que aquellas personas con 63 años o más que jugaban a videojuegos (incluso solo de forma ocasional) admitian sentir unos niveles de bienestar y felicidad más elevados en comparación a los no jugadores, que expresaban emociones más negativas y una tendencia hacia mayores niveles de depresión.
5. Pueden ayudar en el tratamiento de algunas enfermedades
Concretamente, hace un tiempo os hablamos del potencial de los videojuegos para tratar casos de dislexia, autismo y cáncer, donde dichos tratamientos se sirven del potencial de los videojuegos para centrar la atención (en la dislexia), la trama divertida y entretenida de dichos videojuegos para mejorar el contacto visual y la comprensión de las emociones (en el autismo) y las historias que puedan contar los videojuegos para poder explicar como funcionan algunas enfermedades y poder así sobrellevarlas de una forma más amena (en el cáncer).
Por otro lado, la nueva versatilidad de las modernas videoconsolas también ha ayudado a poder usarlas en el tratamiento de rehabilitación de algunas enfermedades como la esclerosis múltiple, en este caso mediante realidades virtuales muy al estilo del dispositivo Kinect de la consola Xbox.