El pescado debería ser uno de los grandes pilares de la dieta española, junto a carne, frutas y verduras, pues deberíamos dar gracias de disponer de esta gran variedad que otorga la Dieta Mediterránea. En su día os explicamos la importancia de consumir pescado, pues los ácidos grasos poliinsaturados que contiene concretamente el pescado azul han demostrado ayudar a combatir el riesgo cardiovascular.
Sin embargo, según la reciente Encuesta de consumo de pescado en España 2015, la población española suspende de forma dramática en el consumo del pescado, y eso es realmente preocupante.
Más del 52% de los españoles consume poco pescado, y el 30% absolutamente nada
El estudio, llevado a cabo por la Fundación Española del Corazón (FEC), llegó a esta conclusión tras realizar una encuesta a más de 2.000 personas: Más de la mitad de los encuestados, concretamente el 52%, afirmaba no consumir suficiente pescado azul. Pero esto no es lo peor, pues el 30%, es decir, 3 de cada 10 encuestados no consumían absolutamente nada del marítimo alimento.
¿Las razones? Entre los encuestados, un 31% afirma que no le gusta dicho pescado, otro 18% comenta que es complicado de cocinar (usar el horno o la parrilla es fácil, ¡probadlo!); y finalmente otro 17% afirmaba que les parecía un alimento caro. En cuanto a comunidades, la zona norte destacaba por ser la que más frecuencia tenía para poner pescado azul en su mesa, mientras que Canarias y la zona del Levante eran los que menos consumían.
Qué es el pescado azul, por qué deberías conocerlo, y cuántas veces deberías consumirlo
Para los que vayáis un poco perdidos respecto a qué es el pescado azul o el blanco, nos referimos a las anchoas, atún, salmón, sardinas o caballas, tipos de pescado que contienen ácidos grasos insaturados tipo omega-3 y a los cuales muchos estudios han otorgado grandes beneficios a nivel de protección cardiovascular.
En la población española es un hecho evidente: NO tomamos suficiente omega-3 a través de la dieta. Tenemos una grave carencia de dicho ácido graso, y el consumo de pescado azul responde perfectamente a esta necesidad de tomar más omega-3. Es un alimento rico en esta grasa saludable, y lo tenemos muy a mano en nuestro país.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), deberíamos consumir como mínimo dos raciones de pescado azul por semana, todas las semanas. Por desgracia, según esta encuesta, aunque hasta el 85% de los entrevistados afirmaba que intentan cuidar su corazón mediante la dieta, y el 69% comentaba que hacía ejercicio. Paradojicamente, el 52% de ellos afirmaba llevar una vida más bien sedentaria, otro 51% padecía sobrepeso u obesidad.
Finalmente, y en cuanto a enfermedades cardiovasculares se refiere, entre los encuestados había un 18% que sufrían hipertensión arterial, otro 15% problemas cardíacos varios, un 13% diabetes mellitus tipo 2, y un 8% sufrían dislipemia (exceso de triglicéridos y colesterol en sangre). Como podréis observar, los datos no son nada halagüeños, y respaldan los datos que sitúan a las enfermedades cardiovasculares como primera causa de mortalidad en todo el mundo y también en España, donde el 30,09% de los habitantes del país mueren por dicha causa según el Instituto Nacional de Estadística.
¿Y qué es lo peor de todo esto? Lo peor, recalco, es la afirmación que hace el mismísimo presidente de la Fundación Española del Corazón, el Dr. Leandro Plaza:
“Un 80% de todas estas patologías podría evitarse mediante la adopción de hábitos de vida saludable, entre ellos, mantener una alimentación equilibraba y cumpliendo con os beneficios nutricionales que nos aportan los alimentos”
Y tú, ¿aún no has hecho un hueco al pescado azul, y a la Dieta Mediterránea en general, en tu día a día?