A pesar de que la genética del autismo cada vez se está estudiando más y mejor, seguimos careciendo de muchos conocimientos acerca de toda la complejidad que oculta el autismo. De hecho, se ha especulado con la posibilidad de que un único gen pueda causar el autismo en humanos, aunque no podemos confirarlo absolutamente.
Por ello, los científicos del MIT han llevado a cabo un nuevo experimento: Monos autistas, es decir, monos modificados genéticamente con un gen del autismo humano.
Monos autistas, ¿avance o exceso de investigación?
Si recientemente vimos cómo se producía el primer trasplante de cabeza in vivo en monos, ahora científicos de China han ido un poco más allá, jugando con la ética de la experimentación animal. Su estudio se ha llegado a publicar en la prestigiosa revista Nature.
En estudios previos ya habían probado dicha modificación en ratones y ratas, pero esto demostró ser poco fiable. Ahora han usado ocho macacos (tres machos y cinco hembras), en los cuales han producido una sobre-activación del gen MECP2, lo cual les produjo rasgos parecidos al autismo humano: Acciones repetitivas, ansiedad, reducción de interacción social…
Evidentemente, las críticas por usar primates no se han hecho esperar, pero los investigadores dirigidos por el Dr. Zilong Qiu se han defendido:
“En la actualidad, los investigadores de todo el mundo están usando modelos de roedores para el estudio de trastornos cerebrales humanos. Ha sido preocupante intentar imitar síntomas complicados del autismo en ratones, por lo que este modelo no está suficientemente cercano a la realidad.
Hemos seguido estrictamente las normas éticas para la investigación en primates no humanos establecidas por EE.UU. y Europa”
Críticas y polémica por la experimentación animal
A pesar de ello, las críticas por el uso de macacos no se han apaciguado, tachando el estudio de “cruel”, ya que varios de los animales enfermaron y murieron en recientes estudios, lo cual lleva a la comunidad científica a la necesidad de buscar enfoques más humanos, usando cada vez menos animales si es posible.
Como bien podemos leer en MIT Technology Review:
“El uso de cualquier mono en investigación, y en especial la creación de monos con trastornos psiquiátricos, es un tema cargado de cuestiones sobre el bienestar animal”
Pero, a pesar de todo, aún hoy en día existen centros de investigación animal en China, Japón y EE.UU. donde los esfuerzos para la creación de monos con errores genéticos se han duplicado, buscando mejorar la investigación de problemas psiquiátricos (como la esquizofrenia).
Vía | MIT Technology Review.
Fuente | Nature.