Un grupo de investigadores de la Universidad de California han inventado una “nanoesponja” capaz de absorber y eliminar de forma segura una amplia clase de toxinas peligrosas que se pueden hallar en la sangre, tales como toxinas bacterianas o venenos de serpientes y abejas. Las nanoesponjas han sido probadas en ratones, con un porcentaje elevado de éxito (el 89% de los ratones que tenían en su sangre una de las toxinas que produce uno de nuestros mayores enemigos en los hospitales, la bacteria Staphylococcus aureus, sobrevivieron gracias a estas nanoesponjas). El interesante y prometedor invento absorbe-toxinas se publica en la revista Nature Nanotechnology.
Las nanoesponjas absorberían varios tipos distintos de toxinas
Las nanoesponjas han sido diseñadas para eliminar un tipo de toxinas en concreto, que son las que crean poros en las células. Si lo pensamos detenidamente, el invento es extraordinario. Hasta ahora, cuando se tiene una infección por microorganismos que producen una toxina en particular, los medicamentos que nos inoculan son específicos para ese tipo de toxina y para nada más, de manera que si en nuestro cuerpo existen varios tipos de toxinas necesitaríamos un medicamento distinto para cada una (me refiero a toxinas muy específicas que no se pueden eliminar con un antibiótico genérico).
El cómo han “fabricado” estas nanoesponjas es todo un acierto. Para que puedan permanecer en el torrente sanguíneo sin que sean eliminadas por nuestro propio sistema inmune, las envuelven en glóbulos rojos, el camuflaje perfecto. La razón de escoger este “disfraz” de glóbulo rojo es porque las toxinas formadoras poros atacan en primer lugar a este tipo de células. Así, las toxinas caen se unirían a las nanoesponjas disfrazadas de glóbulos rojos.
Con sólo una membrana de glóbulo rojo se pueden hacer miles de nanoesponjas, ya que éstas son 3.000 veces más pequeñas que un glóbulo rojo, cuyo diámetro es de 5 micras. El siguiente paso es comenzar con ensayos clínicos en humanos.
Fuente: EurekAlert