Por si no teníamos suficiente con saber que la marihuana provoca esquizofrenia, y que ya de por sí esta enfermedad tiene una predisposición genética, parece que hoy podemos hablar de un factor más a tener en cuenta (y por suerte es evitable): La falta de sueño. Al menos así lo afirma un reciente estudio, donde se ha visto que tras veintricuatro horas de privación del sueño, cualquier persona sana puede acabar sufriendo síntomas similares al trastorno psiquiátrico.
Privación de sueño, un problema mayor de lo esperado
El descubrimiento, a cargo de un equipo internacional de investigadores dirigidos por la Universidad de Bonn y el Kings College de Londres, señala que gracias a estos datos (y a las consecuentes investigaciones que se harán a partir de esto), se podría estudiar más de cerca a aquellos individuos que trabajan en turnos de noche, y protegerlos. Además, la privación del sueño podría servir como un modelo para desarrollar fármacos contra la misma esquizofrenia, según sus resultados publicados en el Journal of Neuroscience.
“Estaba claro que una noche sin dormir conduce a una pérdida sustancial de la capacidad de concentración, pero nos sorprendió lo amplios y pronunciados que son los síntomas similares a la esquizofrenia”
Para llegar a estas conclusiones, tanto los científicos de la Universidad de Bonn, como los del Kings College de Londres y los investigadores del Departamento de Psiquiatría y Psicoterapia del Hospital Universitario de Bonn, examinaron a un total de 24 voluntarios sanos de ambos sexos de 18 a 40 años en un laboratorio del sueño. En un primer momento fueron a dormir al laboratorio, sin más. Luego, una semana más tarde, se les mantuvo despiertos toda la noche mediante películas, juegos, caminatas cortas o dándoles conversación. A la mañana siguiente se les preguntó por sus pensamientos y sentimientos, y también fueron sometidos a una medida llamada “inhibición prepulso”, una prueba para medir la función de filtrado cerebral.
Concretamente, durante el experimento se escuchó un fuerte ruido a través de unos auriculares. El resultado fue que los individuos experimentaron un sobresalto, el cual fue registrado con los electrodos a través de la contracción de los músculos faciales. Si anteriormente se emitia un “pre-pulso”, la respuesta de sobresalto era menor, demostrando así la función de filtrado cerebral. Nuestro cerebro separa lo importante de las nimiedades, evitando así la sobrecarga sensorial.
No dormir reduce el filtrado cerebral
Resultó que en el experimento, el filtrado cerebral se había reducido significativamente tras una noche de insomnio:
“Hubo déficit de atención pronunciada, como ocurre normalmente en la esquizofrenia. La inundación de información no filtrada acabó con un caos cerebral”
Por lo visto, y según los cuestionarios realizados a los voluntarios tras la noche de insomnio, ellos afirmaban ser más sensibles a la luz, el color o el brillo. Por ello, su sentido del tiempo y el olfato estaban alterados. Incluso algunos creían que podían leer los pensamientos, o comentaban algunas alteraciones en la percepción de su cuerpo.
Eso sí, como ya hemos comentado al principio, la privación del sueño podría otorgar grandes beneficios a la investigación de nuevos medicamentos. Anteriormente se simulaban los síntomas de psicosis con otras sustancias activas, pero eran mucho más limitados que los descritos con la falta de sueño. Además, en este caso, tras recuperar la noche con algunas horas de descanso los síntomas desaparecen. Por el momento, parece que son todo ventajas. Veremos si es verdad en futuros experimentos.
Vía | Psypost.