Una de las mayores dificultades en la divulgación científica es lograr explicar los avances en el campo de la ciencia con un lenguaje cercano y entendible para todos los públicos. Los científicos siempre tenemos una fama de personajes cercanos a la locura que estudiamos conceptos complejos y extraños, sin embargo, realmente la ciencia no es tan complicada e inaccesible si está bien explicada.
Hace unos meses, el dibujante de cómics y científico americano Randall Munroe publicó una descripción del funcionamiento de un cohete pero usando únicamente palabras incluidas en una lista de las 10000 palabras más usadas en inglés. Si sabes ingles visita el cómic porque no tiene desperdicio: ante la falta de términos adecuados el autor usa frases como “el fuego sale por aquí” y describe los tanques de helio como “tanques con ese gas que vuelve tu voz graciosa”. La idea tuvo éxito y se diseñó un editor de textos que te obliga a usar solo palabras comunes, retando a los científicos a explicar sus investigaciones de la manera más simple posible. La mayoría de descripciones están en un Tumblr llamado Ten Hundred Words of Science, dirigido por los geólogos Anne Jefferson y Chris Rowan.
Algunos de los ejemplos de investigaciones ultrasimplificadas vienen a continuación, traducidas al español para disfrute de los lectores de Medciencia.
Antropologia
Yo estudio cosas humanas antiguas. Nosotros investigamos estas cosas antiguas para saber de dónde y de cuando vienen; y así nos preguntamos porque hacemos cosas diferentes a los demás animales. (Meagan Sobel, estudiante de Antropología)
Ciencias Ambientales
Yo estudio cómo el agua del cielo llega al suelo cuando hay árboles en el camino, especialmente los árboles que se han quemado o han muerto. Trato de averiguar si los arboles cambian la cantidad de agua que llega al suelo y qué le pasa al agua cuando está en el suelo. También trato de averiguar qué va a pasar con el agua en los próximos diez años. Esto es importante para las cosas que crecen en el suelo y que viven en el agua, y para el agua que utilizamos para beber. (Sarah Boon, científico ambiental)
Física de partículas
Donde yo trabajo, golpeamos cosas pequeñas para romperlas en cosas aún más pequeñas hasta que tengamos las cosas más pequeñas posibles. Así es como sabemos de qué está hecha la materia. (Paul Sorenson, físico que estudia el plasma de quark-gluón con el Colisionador de Iones Pesados del Laboratorio Nacional Brookhaven.)
Psicología Cognitiva
Si queremos saber cómo el cerebro crea recuerdos y utiliza la memoria, tenemos que hacer que la gente haga cosas como aprender cosas y luego recordarlas. Quiero saber cómo nos imaginamos las cosas, y cómo la memoria lo hace posible. Así que les pido personas que imaginen cosas y vemos lo buenos que son describiéndolas. Luego, nos fijamos en el funcionamiento del cerebro usando una caja grande que emite un ruido fuerte y que toma imágenes del interior de la cabeza. También pedimos a las personas que les falta un pedazo de cerebro que hagan cosas para ver si pueden hacerlas o no. Entonces sabremos qué hacen las diferentes partes del cerebro y un día pondremos todas las piezas juntas para entender la mente “. (Kristoffer Romero, estudiante de doctorado en la Universidad de Toronto)
Ingeniería Aeroespacial
¡Mi trabajo es divertido! Hago un coche que va a ir al espacio y que se conecta a una casa que ya está allí. Las personas y cosas podrán montar en mi coche espacial. Yo trabajo en mantener la ventilación y el calor dentro del coche. (Nicole Resweber)
Inmunología
A nuestro cuerpo no le gusta recibir visitas de otras cosas que no parezcan amigos. Cuando entran, nuestras células las observan con diferentes tipos de ojos. Los diferentes ojos distinguen diferentes figuras y formas, para poder averiguar qué cosa es y qué hacer con ella. Estos ojos no son ojos normales, también funcionan como pequeñas manos y pueden agarrar cosas. Estoy estudiando uno de estos ojos que ve cosas raras, como esas cosas que crecen en los alimentos cuando caducan. Pero este ojo no trabaja solo, tiene algunos amigos que le prestan ayuda. Cuantos más ojos, mejor. Entre todos cogen al extraño y se lo comen. Una vez comido muestran los trozos sobrantes a sus amigos. Así ellos saben qué tipo de chicos malos hay que combatir. También pueden llamar a más amigos si hay una gran cantidad para comer. Así es como nuestro cuerpo nos mantiene libre de enfermedades y podemos ser felices, ¿no es increíble? (@Analobpas, hablando de lectinas tipo C)
Ritmos circadianos
Los pequeños animales voladores pueden decir la hora, y también decir la época del año. Está todo en sus cabezas. (Bora Zivkovic)
El método científico
Tienes dos cosas que crees que van a ayudar a los enfermos a mejorar. Da una a las personas en el grupo uno, y la otra a las personas en el grupo dos. Si es posible, es una buena idea asegurarse de que los enfermos no saben en qué grupo se encuentran. Lo mismo para las personas que trabajan en el problema. Esto es por una buena razón: hemos encontrado que la gente se recupera más rápido cuando creen que se les ha dado algo que funciona bien para que se sientan mejor, incluso si no lo han hecho realmente.
Sabes lo que está mal en los enfermos, así que sabes cuánto tiempo necesitarán para que se recuperen. Esperamos y miramos si las personas se recuperan más rápido (¡o mejor!) en el grupo uno o en el grupo dos. Esto dirá cuál de las dos cosas ha ayudado más a la gente.
Mirar un gran número de personas enfermas ayudará a asegurarse de que tienes la respuesta correcta. Si tienes compañeros que han tratado la misma idea, puedes añadir tus números a sus números y tener una idea más clara de lo que funciona mejor. ¡No dejes que nadie esconda sus números! (Ben Goldacre, investigador médico y divulgador)
Ya hemos visto algunas explicaciones simplificadas (y algo esquemáticas) de diferentes investigadores. Si trabajas en la ciencia, ¡atrévete a hacer tu propia versión ultrasimplificada y compártela con nosotros!
Fuente | Mental Floss