Cada año salen nuevas enfermedades, desconocidas para todos en un primer momento, pero la gripe es una de esas que si conocemos. El susto nos lo llevamos cuando el “malo conocido” cambia (muta, en este caso) y nos da un susto de los buenos. Esto ha pasado varias veces durante la historia, donde el virus de la gripe ha cambiado/mutado y ha dado lugar a las famosas pandemias (la gripe española en 1918, la gripe asiática en 1957 o gripe de Hong Kong en 1968, y la famosa Gripe A en 2009). Hoy, nos centraremos en la asiática y la de Hong Kong, que fueron dos variedades de la Gripe Aviar.
En un principio, el gobierno de EE.UU. prohibió la publicación de este estudio por el riego de bioterrorismo a consecuencia de la información vertida en los resultados, pero finalmente, y después de 9 meses, han dado permiso para su publicación (han considerado que los beneficios ganan a os riesgos). Finalmente, se ha demostrado el potencial agresivo de una mutación de este virus, y la ciencia debe prepararse para lo que pueda venir.
Para ponernos en materia, teóricamente, el virus se transmite entre aves y de aves a humanos, pero no entre humanos. Este estudio demuestra que con solo 5 mutaciones si seria posible un contagio entre humanos. La investigación se ha realizado, por una parte, por Ron Fourchier y su equipo del Centro Médico Erasmus de Rotterdam (Países Bajos) y, por otra parte, un trabajo similar publicado por Yoshi Kawaoka de la Universidad de Wisconsin-Madison.
Cada laboratorio hizo pruebas diferentes con el virus de la Gripe Aviar o H5N1 para comprobar que podía ser transmisible. Según informa Fourchier:
“Ahora sabemos que hace que cambie el comportamiento del virus para que sea transmisible, que puede deberse a las diferentes mutaciones, y no solo a el tipo de individuo infectado”
La pregunta sería, ¿es posible que estas mutaciones ocurran en la naturaleza? Pues, según un documento complementario, Derek Smith y Colin Russell, de la Universidad de Cambridge, y sus colegas, dicen que estas mutaciones ya ocurren en la Gripe Aviar de forma natural.
Hay un tipo de mutación, referente a la enzima polimerasa (responsable de una parte de la replicación del virus), que se produce en el 30% de los casos de H5N1. La pérdida de su azúcar de membrana se produce en el 50% de los virus, y las dos mutaciones se han visto en el virus de China.
El equipo de Russell calcula que, con solo tres o cuatro mutaciones menores, el virus podría ser transmisible por aire entre personas. Y podría estar ocurriendo ya, ya que en un estornudo puede haber virus que sean ligeramente diferentes entre si, aunque la mayoría son muy similares.
Como conclusión, puede que algunos estén de acuerdo y otros en contra de la publicación de estos trabajos. Personalmente, creo que vale la pena saber a qué riesgos estamos expuestos y poder prepararnos contra ellos, y que los beneficios del conocimiento superan los riegos de posible bioterrorismo, entre otros riesgos.
Vía: New Scientist