Aunque no soy partidaria de realizar cambios en la alimentación únicamente por el hecho de ser una fecha determinada (como puede ser para un evento especial), hoy empezaremos con los nuevos propósitos de año nuevo. Aún así, siempre es mejor tener alguna razón la cual nos lleve al motivo de realizar un cambio positivo en nuestra alimentación que ni siquiera contemplar esta posibilidad.
Por ello, aquí os dejo una pequeña lista de alimentos que sería recomendable eliminar de la alimentación del día a día.
Alimentos refinados
Sigo escuchando casi a diario en consulta el típico comentario tras la pregunta de: ¿qué tipo de pan consumes? y la respuesta en el 80% de los casos suele ser la misma, “del normal” que para esto si el 100% de la gente parece ser el pan blanco. Pues bien, intentemos que el normal sea siempre el integral, y por integral exijamos que sea también del de verdad y no el que suelen vender en los supermercados. Y sí, también lo hacen en las panaderías.
No solamente el pan, intentemos que las pastas, arroces, cereales… todo sea procedente del grano entero sin refinar; esto no tan solo nos aportará mayores cantidades de fibra, vitaminas y minerales, también tendrá un efecto saciante de mayor duración.
Cereales de desayuno y barritas
Ambos alimentos consumidos con la falsa creencia de ser un producto que se pueda considerar para consumo habitual, sin considerar que en la mayoría de casos poseen altas cantidades de azúcar y bajo aporte de nutrientes. Por lo tanto, tan solo nos aportaría en gran medida calorías vacías, y aunque puede sernos de utilidad en ocasiones específicas como en deportistas, para la gran mayoría este alimento no debería ser de consumo habitual.
Salsas para ensaladas
Sin duda las ensaladas, sería uno de los platos considerados como saludables por excelencia, con fama de ser el plato estrella en “dietas de pérdida de peso”. Si bien es cierto que una ensalada debería de suponer un plato de bajo aporte calórico, ya que los alimentos que la suelen componer en su gran mayoría verduras y hortalizas poseen una baja carga calórico, ¿qué problemática puede surgir?.
No tan solo de la utilización de alimentos que aumentarían en gran medida el aporte calórico de la ensalada como podrían ser quesos, bacon, frutos secos (aunque sean saludables). Saludable y aporte calórico elevado puede ir unido, si este aporte elevado de calorías provienen de alimentos saludables como aceite de oliva y frutos secos, el problema ocurre cuando “engañados” por suponer que al consumir una simple ensalada podemos permitirnos el uso de cualquier tipo de salsa sin importar su aporte calórico, y muchas veces de procedencia comercial, una sanísima ensalada puede convertirse en un plato altamente calórico y de bajo aporte nutricional.
Por ello realizar salsas caseras, o simplemente disfrutar del plato de ensalada con aceite de oliva extra virgen puede ser una gran sustitución a la hora de consumir ensaladas.
Estos son solo algunos ejemplos de alimentos que deberían desaparecer de nuestro día a día en este próximo año, ¿se os ocurre alguno más? Os invito a dejar ideas en los comentarios.