Nunca me cansaré de decir cómo, durante estas últimas décadas y cada vez más, todo parece estar controlado por nuestra dotación genética. A veces, incluso algunos de los más optimistas nos volvemos un poco nihilistas pensando si acaso no tenemos ninguna elección, si todo nos viene determinado desde nuestro nacimiento en esa bonita doble hélice que es nuestro ADN… Bueno, pues no os deprimáis todavía porque nuestros genes también se van modificando a lo largo de nuestra vida a causa de factores externos, como el ambiente en que vivimos, lo que comemos, el estilo de vida que llevamos… Además, los genes también nos pueden ayudar, como demuestra este estudio, a tener una vida más feliz. Al menos a las mujeres…
El experimento lo han llevado a cabo cientificos de la University of South Florida (USF), de los National Institutes of Health (NIH), Columbia University y el New York State Psychiatric Institute y con él han descubierto que la variante de baja expresión del gen monoamina oxidasa A (MAOA) asocia niveles más altos de felicidad en mujeres. No obstante, parece ser que esta relación no existe en los hombres.
“Me sorprendieron los resultados, porque la baja expresión de MAOA ha sido relacionada con algunos efectos negativos como alcoholismo, agresividad y comportamiento antisocial,” dijo Henian Chen, profesora adjunta en el Departamento de Epidemiologia y Bioestadistica del USF College of Public Health.”Algunos científicos incluso le llaman el “gen guerrero”, pero, al menos para las mujeres, nuestro estudio apunta a un lado más optimista de este gen”
El gen MAOA regula la actividad de un enzima que reduce la serotonina, dopamina y otros neurotransmisores en nuestro cerebro (los mismos neurotransmisores que se usan como diana en los fármacos antidepresivos). Por otra parte, esta variante de baja expresión del gen promueve niveles más altos de monoamina.
Los resultados de la investigación fueron los siguientes:
- Las mujeres que tenian la variante de baja expresión del gen MAOA (un 59%,de las mujers tienen esta variante del gen) eran significativamente más felices que las que no tenian ninguna copia para dicha variante del gen.
- Además, las que poseían dos copias, incrementaban aún más su puntuación en el test utilizado como escala para evaluar la felicidad.
Estos hallazgos han sido publicados en la versión online de la revista Progress in Neuro-Psychopharmacology & Biological Psychiatry.
Mientras ellos experimentan mayores niveles de desordenes de ansiedad y del estado de ánimo, las mujeres tienden a referir mayor felicidad en su vida en general. La razón de estas diferencias entre hombres y mujeres continúa siendo un misterio.
Aún así, los investigadores que tomaron parte en este estudio tienen la teoría de que es posible que “el alto nivel de testosterona en los hombres pueda compensar el efecto alelo que el MAOA-L produce en las mujeres”. La investigadora Henian Chen señalaba recientemente a The Daily Mail que “quizá los hombres sean más felices durante la adolescencia ya que su nivel de testosterona es menor en esos momentos”.
Chen hace hincapié en que se necesita más investigación para identificar qué genes específicos influencian la capacidad de recuperación y el bienestar subjetivo, sobre todo desde que los estudios con gemelos estiman que los factores genéticos explican del 35 al 50 por ciento de la variación en la felicidad humana.
Fuentes: Science Daily/El Confidencial