Empezando por las verrugas genitales y terminando por la papilomatosis respiratoria recurrente o PRR, los signos y síntomas causados por el VPH son muy variados.
Las verrugas genitales suelen aparecer como granitos, individuales o en grupo, pequeñas o grandes, planas o elevadas o en forma de coliflor. Se pueden diagnosticar con una simple observación médica y pueden aparecer semanas o meses después del contacto sexual con una pareja infectada (aunque esta no tenga signos de verrugas genitales). Sin tratamiento pueden desaparecer, permanecer igual o aumentar en tamaño y número. No dan lugar a cáncer.
El cáncer de cérvix o cuello uterino no suele presentar síntomas hasta una etapa avanzada. Por eso es importante la realización periódica de pruebas de detección de cáncer de cuello uterino por parte de las mujeres. Con estas pruebas se pueden identificar signos iniciales de la enfermedad para tratarlos lo más rápido posible antes de que deriven en cáncer.
Otros cánceres relacionados con el VPH son difíciles de tratar, pues no presentan signos ni síntomas hasta etapas avanzadas. Podemos hablar de cánceres de vulva, vagina, pene, ano, cabeza y cuello.
Por último, la papilomatosis respiratoria recurrente o PRR da lugar a verrugas en la garganta que pueden llegar a bloquear las vías respiratorias, causando ronquera o dificultad respiratoria.
Pero, realmente, ¿Cómo se contrae el VPH genital?
Su transmisión es por contacto sexual, a menudo por relaciones sexuales vaginales y anales, pero también hay transmisión por relaciones sexuales orales y contacto entre partes genitales. Se puede transmitir entre parejas heterosexuales y homosexuales, ¡aun cuando la pareja infectada no tenga signos o síntomas!
Una persona puede tener VPH años después del contacto sexual con una pareja infectada. Como ya he dicho antes, la mayoría de las personas infectadas no lo saben, y también desconocen que están transmitiendo el virus a su pareja. Dato importante: es posible contraer más de un tipo de VPH.
En muy pocos casos, una mujer embarazada infectada de VPH genital puede transmitir el virus a su bebé durante el parto, dando lugar a que el bebé contraiga papilomatosis respiratoria recurrente.
Para terminar con esta infección, destacar que existen métodos de prevención, como las revisiones periódicas en mujeres mediante pruebas de Papanicolau. Para el tratamiento de verrugas genitales existen diferentes medicamentos. Y como avance de los últimos años, se ha implementado la vacuna contra el virus del papiloma humano, dispensada en las adolescentes de 11 a 14 años en nuestro país.
Vía: CDC / Instituto Nacional de Cáncer.